Mi mamá y yo somos dos pecadores sin remedio - Relatos Eróticos

Mi mamá y yo somos dos pecadores sin remedio

Era el cumpleaños de mi madre y antes de que llegara la familia comenzamos a hacer el amor en el piso de la sala:

- Hijo mío hazme tuya en el piso, hoy me puse el vestido que más te provoca o que ya no te exito?

- Mamá, como dices eso sí tú eres la mujer más bella que conozco y el amor de mi vida

- Demuestralo

Se la comencé a meter de forma salvaje y ella solo gritaba llena de placer. Cuando terminamos de hacerlo nos levantamos y antes de comenzar a vestirnos, nos besamos mientras le agarraba las nalgas. En ése momento una tía (a la que meses después le di y no consejos) y mi abuela entraron y nos vieron como nos estábamos besando:

- Luz Elena (a si se llama mi mamá) como es posible que te encontráramos haciendo el amor con tu hijo?

- Mamá y hermana, ahorita Emilio y yo les explicaremos cómo se dieron las cosas pero dejenos que nos vistamos.

Después de que nos vestimos,  les dijimos toda la verdad, mi tía dijo que teníamos todo su apoyo (ella andaba con un chavo 20 años menor) que ella no veía problema en la relación, pero mi abuela suegra dijo:

- Son unos pecadores Dios los va a mandar al infierno

En ese momento iba a cachetear a mi madre pero la detuve y mamá y yo nos dimos un beso de amor muy apasionado. Y dijimos:

- Creemos en Dios, pero esta es nuestra vida y estamos enamorados.

- Ustedes pueden quedarse en la fiesta pero si se quieren ir vallanse, nosotros nos iremos a la alberca