Me dejan plantada - Relatos Eróticos

Me dejan plantada

... mire a los ojos y le dije un idiota, pero no vale la pena hablar al respecto de eso.
Le comenté veo que no eres de aquí ¡verdad! Germán me dijo estás equivocada soy de México pero soy de  descendencia africana, soy de una población llamada Yanga y está en Veracruz, soy ingeniero textil y a hora vengo de Francia dónde fui mandado para ver unas máquinas por la presa en que trabajo, me quedé sorprendida, ya que nunca pensé que hubiera personas de color en México, seguimos charlando y Germán pidió un tequila y me dijo ¿Quieres uno tu también? Le dije ¡sí claro! Para no hacer más aburrido el relato nos tomamos seis tequilas cada uno, me dijo ¿nos vamos a caminar un rato?, Si fue mi respuesta salimos del lugar, no sin antes pagar la cuenta, al poner el primer pie fuera del restaurante, me comencé a marear por los tequilas que me había tomado, me tomo del brazo y me dijo ¿Te gustaría ir a un lugar más íntimo?  -Si le dije riéndome, paramos un taxi sobre el eje central y le dijo nos llevas al hotel ....... llegamos a un hotel muy bonito, yo había oído hablar de este pero no había ido, al entrar al Hall había varias parejas que se nos quedaron viendo, y una de las chicas de esas parejas me sonrió y pasó su lengua por sus labios, Germán pidió una habitación y una botella de tequila y dos vasos, le dijo el de la recepción, si está bien haré que se los lleven al cuarto, le entrego la llave y caminamos al elevador yo seguía medio mareada pero consiente, al llegar al cuarto asignado ...

... Germán abrió la puerta y me dejó entrar, yo estaba muy nerviosa, esto era mi primera vez con un extraño, Germán vio mi nerviosismo y me dijo relájate toma esto con calma, se sentó en una de las sillas que había en la habitación, y me dijo siéntate mientras nos traen la bebida que pedí pasaron algunos minutos y yo seguía un poco nerviosa ya mis nervios se habían calmado un poco, habían transcurrido unos minutos desde que entramos al cuarto cuando tocaron a la puerta, Germán se paro dirigiéndose a la puerta, sin preguntar nada dijo una voz servicio al cuarto,  en ese momento abrió la puerta y dejó entrar al hombre que llevaba la botella de tequila y los vasos tequileros, le dijo Germán, los puede poner encima del buró, a lo que el hombre asintió con la cabeza dejando la bebida y los vasos, se retiró hasta la puerta y Germán pago retirándose aquel hombre y cerrando la puerta, Germán me dijo !vas a querer un tequila¡ con eso se te aplacarán los nervios, lo mire y le dije sí pero no solo uno quiero dos, me sirvió el primero y de un solo trago lo bebí, Germán sonrió y me dijo ya más calmada yo sonreí y le dije creo que sí, le di mi vaso y me sirvió el otro tequila, el tomo al igual que yo, al darme nuevamente el vaso me agarró la mano y me dijo te ves hermosa, yo pícaramente le dije sí me veo así y le sonreí, me tomé rápido el tequila y me inundó un calorcito muy rico, esto hizo que me parara frente a el y le diera un beso, una de mis manos se fue a su entre pierna para sentir esa verga ...