Defendiendo a mi hermana - Relatos Eróticos

Defendiendo a mi hermana

Salí como un rayo cuando la escuche gritar a mi hermana en la puerta de nuestra casa. Al cabrón le di dos golpes en la cara y se escapó. Adentro le pregunté qué le hizo, me dijo que le torció la muñeca y quería golpearla. Le dije que no lo vería nunca más. Después de tranquilizarnos nos echamos en su cama, ella me abrazó, cruzó sus piernas sobre las mías y apoyó su cabeza en mi pecho. Levantó su cabeza y ofreciéndome sus labios me dijo: que macho fuiste al defenderme, te portaste muy machote. No fue más, nos besamos rico y largo, sentir su aliento, sus labios sensuales , su lengua caliente hizo que se me pare la verga. Mientras me la cogía, me dijo méteme tu dedo al culo, y luego chupe mi dedo y se lo metí a su boca. Cuando llego tarde en la noche ella me espera, me sirve comida caliente y luego nos vamos a su cuarto a coger, mis padres sospechan pero no dicen nada. Cuando ella sale, le doy un rapidin, para que no estés viendo cabrones, le digo. Le dejo su panocha bien mojada con mi semen y mi saliva. Cuando yo salgo, ella sumisa y ...

... dulce, me dice: te la puedo chupar para que no mires viejas?. Y me la chupa y se traga el semen. Cuando mis papás viajan tenemos dos o tres días para nosotros. Me hace un beso negro, que lame y chupa mi culo mientras me masturba y luego yo le meto mi lengua a su culo y su panocha y le hago terminar así, la dejo con las piernas temblando. Ella me dijo un día, que para que la gente no hable ni sospeche que me consiga otras viejas, pero que ella siempre me sería fiel. Son ya tres años que cojo con mi hermana y soy muy celoso, como buen macho dominante le hablo fuerte y cuando estoy celoso y con tragos la zamarreo pero no le hago daño. A ella le gusta que la cele y cuando me la cojo estilo perrito le doy fuertes palmadas en su culo, le pregunto si es sólo mía, si le gusta ser mi puta, la puta de su hermano....ella me responde que le gusta que sea su macho. Después de coger, cuando conversamos mientras merendamos, siempre me dice que se le humedeció mucho la panocha cuando la defendí de aquel novio que tuvo y no volvimos a ver. Continuará.