... pedí que me ayudara. Usando sus manos, separo sus nalgas y me dio acceso a su culo. La penetré poco a poco, obviamente cuidándola y no lastimarla. Al escuchar su gemido, me di cuenta que ya estaba en el lugar indicado, así que la agarré de la cadera y comencé suavemente a penetrarla, ella apretaba fuerte, y apretaba los ojos.
Mi vista era preciosa, podía verle su larga espalda y trasero golpeando en mis muslos, pero por el espejo que estaba en el respaldo de la cama, veía su rostro de dolor y gusto, abría la boca y mordía la almohada, sonreía y gemía, en momentos me veía a los ojos desde el espejo y volvía a sonreír, esto mientras mi movimiento era cada vez más duro. Ella se movía en varias posiciones, se recargaba en sus codos, con sus manos, luego se dejaba caer toda en la cama, estaba sintiendo cada vez más excitación, en ocasiones se levantaba y me dejaba tocarle los pechos para afianzar más el proceso. Le besaba la mejilla, le mordía la oreja, y cada vez más, mi empujón se hacía más fuerte.
Después de un rato se alejó de mi y me pidió que me sentara en la orilla de la cama, me volvió a dar la espalda y comenzó a darme unos ricos sentones, la verga cada vez resbalaba mejor, su orificio era más amplio por lo que la cosa se ponía mejor cada vez. Después se bajó las bragas e hizo algo que me encantó. Puso mi verga de manera vertical entre sus dos nalgas, y comenzó a hacerme un "assjob", tipo una paja rusa, pero con su trasero. La cosa era majestuosa, después de eso, ...
... ella decidió quitarme el condón y me dijo que si podíamos hacerlo al natural. Yo la verdad dudé, pero como sabía se su procedencia, creía que el riesgo (aparte del tema de la limpieza) iba a ser menor, así que acepté. Comenzó nuevamente a hacerme una felación y se puso en cuatro puntos en la cama, me subí a la cama y la penetré nuevamente de perrito, la tomé fuertemente de la cadera y la penetré con fuerza. Se escuchaba en toda la habitación el golpeteo de sus nalgas y sus gritos de dolor y gozo.
Comenzaba a decirme cosas como "dame más fuerte", "cógeme cógeme duro", "mi culo es tuyo, cógetelo"... Cosa que me prendía y me orillaba a hacerlo más y más fuerte. Cuando sentía que me venía, me detenía y eso nos permitía respirar un poco y volver a comenzar. Ella si llegó a terminar varias veces, puesto que mientras yo la cogía, ella se masturbaba y se daba su propia atención. Después de un rato, ella me pidió que termináramos, puesto que se estaba haciendo tarde y ella ya quería que fuera mi turno. Le pedí que nos fuéramos a bañar para limpiarme y terminar en su boca, ella aceptó. Nos fuimos a la regadera, me lavé varias veces mientras ella también se daba su ducha.
Comencé a masturbarme viéndole las nalgotas que recién me acababa de coger, ella volteo y me detuvo, se arrodilló y mientras le caía agua de regadera en su rostro, comenzó a mamarme la verga, lo hacía fuerte y contundente, con la mano derecha me masturbaba y con su boca al mismo ritmo, me succionaba, se pasaba a ...