1. Una mamada express en plena calle


    Fecha: 12/02/2023, Categorías: Confesiones Autor: Sinbandejadeent, Fuente: CuentoRelatos

    ... iba muy concentrado en conducir, pero también me dejaba soltar un poco por lo que ella hacía conmigo.
    
    De pronto, pasamos por un centro deportivo, que está abierto para entrar ya sea a pie o en tu coche y dejarlo estacionado en alguno de los espacios para coches, así que entré por ahí, me fui hasta el fondo, en una zona de muchos árboles, y me detuve. Dejé el coche encendido y me recargué para disfrutar lo que mi vecinita hacía conmigo. Se escuchaban fuertemente las lamidas que hacía, su boca jugando con su saliva y seguro con algunos de mis jugos preseminales, que tenía ya saliendo de mi pene.
    
    Entonces ella se levantó la falda y me dejó tocarle sus piernas, mientras seguía mamándome la verga con delicadeza. Cabe mencionar que ella es una experta en esto del sexo oral, es bien lanzada, me chupa los testículos, incluso abajo del escroto, ella sabe exactamente donde presionar con su lengua para hacerme sentir bien atendido. En fin, ella me seguía lamiendo y jalándome la verga, estaba decidida a hacerme terminar lo antes posible. Pero por la posición en que se encontraba, me pidió bajarnos del coche, yo no estaba seguro de hacerlo, pero ya en la calentura, me valió madres. Ella se bajó del coche y se pasó al lado del piloto, abrió la puerta y yo con el pants a las rodillas solo me volteé hacia ella, ella se hincó y con la puerta abierta y el coche encendido, siguió mamándomela.
    
    La escena era deliciosa, yo sentado en el coche, y ella sentada a mis pies, haciendo un gran ...
    ... trabajo. Con una mano tomaba mi verga y con su boca chupaba y lamía, era excelente. Yo la agarraba en ocasiones de la cabeza y le sumergí toda la verga hasta tocar su garganta, estaba totalmente excitado y la verdad, perdiendo un poco de empatía, control de la situación y del contexto jaja... Pasando unos minutos, ella me pidió apresurar el paso, ya que estábamos expuestos y ella tenía que regresar a clases, así que la alejé un poco y comencé a masturbarme, ella mientras me chupaba mis huevos con un gran afán, me los acariciaba mientras yo me masturbaba a una gran velocidad.
    
    Comencé a sentirme caliente y le dije que se preparara, ella abrió la boca y me dijo con una deliciosa voz "échamelos en la cara, quiero probar a que sabe tu semen"... cosa que me hizo dispararle un gran chorro de espera en la cara, le rocié el pelo, los ojos, la boca, era una gran explosión. Ella con su boca abierta recibía mis mecos calientes, al terminar el gran disparo, con su boca empezó a limpiarme los restos de espera de mi cuerpo, lo que tenía en las piernas, en mi pubis, incluso en mi mano.
    
    Después comenzó a chupar nuevamente mi glande de manera suave, con la idea de quitarme todo rastro de esa gran mamada. Se limpiaba la cara con sus manos y como si fuera miel, empezaba a lamerse los dedos, tomaba más suavemente mi verga y con pequeñas "exprimidas" lograba sacar hasta la última gota, mismas que ella quitaba con la punta de su lengua, era una cosa de locos. El semen que se dispersó por todos ...