La mirada de zorra
Fecha: 22/11/2022,
Categorías:
Sexo en Grupo
Autor: Anónimo, Fuente: RelatosEróticos
... porque yo sí que me estaba disparando.
Pero había que normalizar la situación. No te follas a un invitado a casa sin darle opción a que se lo vea venir y a que se manifieste.
- Bendito naturismo -suspiré mientras volvía a sentarme con ellos a la mesa.
- ¿Solo naturismo? -me preguntó Álex.
¿Qué estaba insinuando, que se me notaba mucho? Guardé un necesario silencio durante un par de segundos que me sirvió para ordenar las ideas antes de reaccionar de cualquier modo: Estábamos en una situación propensa al trío rollo universitario de estos dos, eso era evidente. Los tres sabíamos de la historia y yo ya me había mostrado, como poco, preparada para no escandalizarme al hablar de sexo. Así lo había dejado claro hacia tan solo unos minutos, al decirle a Álex que no me importaba escuchar hablar de la loca vida sexual pasada de mi pareja cuando le dije que la conocía.
De manera que, a la pregunta de Álex, no tenía por qué responder haciéndome pasar por la recatada sorprendida. Me habría resultado complicado, teniendo en cuenta además que tenía la libido por las nubes, como también os he dicho ya. Así que no tenía por qué decirle que quería follármelo pero sí que podía contarle otras verdades.
- Siempre hay un poquito de sensualidad en el naturismo -empecé a responder-. Al menos, a mí me ocurre. No sé, supongo que la erótica de los cuerpos es algo que siempre está ahí, ¿no?
Iba a haberlo dicho, pero no me pareció adecuado hacer una referencia directa a sus pollas ...
... nada más empezar a hablar. Y, aquellas dos erecciones, eran dos pilares irrefutables sobre las que argumentar mi teoría.
Y, ¡hostias!, esa frase era muy buena como para no decirla.
- Y sustento mi teoría de la erótica de los cuerpos sobre esos dos pilares... -y, con el brazo medio extendido y la mano de canto, la sacudí para identificar a qué pilares me refería pero tratándolos con cierto desdén o poca importancia. Buscando más el comentario simpático que el desprecio, claro.
- Son buenos argumentos, sí -me dijo Javi tras echarle un vistazo a las dos pollas empalmadas.
- Tú eres de las listas... -murmuró entonces Álex.
Fue su forma de decirlo lo que revelaba la doble intencionalidad de la frase. Aunque, tal vez, solo tuviera una. ¿O, acaso, no os habéis acordado vosotros de “las tontas” y “las listas” a las que, estos dos, se follaban? Pues a mí se me vino a la cabeza de inmediato.
- Sí -le contesté-. Y, la tonta, es la que está en la piscina de al lado con su novio y otra pareja.
Javi no se había dado cuenta del tirito que me había pegado Álex hasta que le contesté. ¡Es tan expresivo! Primero puso cara de “¡coño! Que aquí ya se dispara con fuego real” para, a continuación, poner cara de “qué sabes tú que está pasando en la piscina de al lado”. Álex, por su parte, sonrió al confirmar que, efectivamente, soy de las listas.
- A pesar de que eres la misma, qué distinta eres a la Naty que he conocido esta mañana. ¡Qué agradable sorpresa! No me esperaba que ...