Fecha: 16/11/2022,
Categorías:
Intercambios
Autor: Edu y Pam, Fuente: CuentoRelatos
... respiración incrementar su ritmo en respuesta a las caricias que recibes. En pocos momentos, llevas una de tus manos hacia la suya para enseñarle como tocarte y el ritmo que más disfrutas, a la vez que volteas a besarme y me dices lo rico que te está tocando, que te mojas con cada caricia y lo excitante que es para ti ese momento.
Nuestra cercanía es tal que ahora ella acerca su mano para acariciar tu cara. Recibes su caricia y a alcanzas a besar ligeramente el torso de su mano. Entonces ella baja por tu cuello y desliza ahora la palma por tus senos, sopesándolos, disfrutando de tenerlos en su mano, deteniéndose a jugar con tus pezones entre las llenas de sus dedos. Por respuesta le levantas tu tórax para mostrarle tu aceptación a sus caricias y el deseo de que te siga tocando.
Él no tarda en sacar su mano de tu sexo, completamente mojada y la acerca a su boca para saborear tus jugos y ella se inclina hacia él para lamer su mano, recogiendo tus líquidos y besándose entre ellos, mientras él regresa sus dedos a tu vagina que está completamente empapada por tu excitación, y recibe de nuevo dos y hasta tres dedos que se pierden sin problema en tu interior. Sin desmontarse de la verga de su pareja, ella empieza a acercar su cara a tu cuerpo, alcanzando a besar tu hombro y desplazándose hacia tus senos. Vuelves a levantar el tórax, arqueando tu espalda para ofrecérselos, deseosa que ella llegue a tus pezones que ya están duros y tus senos turgentes de excitación. Ahora ...
... ella puede sentirlos directo, su mejilla los roza, se apoya con una mano en tu pierna, y desplaza su cara sobre uno de tus senos, respirando sobre tu pezón erecto, provocándote intensas sensaciones. Yo puedo ver cómo te están tocando entre los dos. La forma que los labios de ella rozan ligeramente tus pezones erectos, y eventualmente su lengua llega a lamer en forma excitante tu piel, a la par de sentirte penetrada con mayor intensidad por los dedos del amigo.
Es muy excitante y tu dedicas una mano a seguir masturbando mí ya duro pene. Después de unos momentos de intensa excitación, decides incorporarte un poco, para acercarte más a ellos, quedando ligeramente hincada, dándome la espalda, de frente a ellos y permitiendo más acceso a él para que siga acariciándote, lo que aprovecha para llevar su mano hasta tu culito y jugar un poco con él haciendo presión con sus dedos en la entrada. Eso te estremece.
Ella se incorpora también un poco y voltea más su cuerpo para quedar frente a ti. Tú empiezas a acariciar su espalda, y ambas van acercando sus caras. Le tomas la cabeza y la llevas a tus senos, no tarda en entender el mensaje y comienza a lamerlos y chuparlos con intensidad. Te gusta sentir su boca en tu cuerpo. Él intensifica sus caricias y vuelve a meter dos dedos en tu ardiente y mojada vagina, a lo que respondes moviendo tu cadera para incrementar las sensaciones en tu vagina y clítoris. Desde mi posición puedo ver cómo su mano eventualmente toca tu cadera y vuelve a ...