Mi mejor experiencia en Brasil
Fecha: 02/11/2022,
Categorías:
Sexo en Grupo
Autor: elgato1976, Fuente: CuentoRelatos
... dorada, ojos azules verdosos y las piernas más largas del mundo.
-Perdón si miré de más, pasa que...
-Está todo bien -dijo la rubia, que seguía con su sonrisa puesta- No nos ofendemos porque nos miren
-A vos no te ofende! -dijo la morocha- Yo no quiero que me ande mirando cualquiera que pasa por adelante!
-Bueno, Cami, relajate, no pasa nada, pidió perdón y ni te habló, además... es lindo, no?
Cami, la morocha, la miró a la rubia con gesto inverosímil. Agarró su parte de arriba de su bikini, se levantó de la manta y se fue al mar sin decir palabra.
-Perdón por mi amiga, es muy feminista y no soporta que los hombres la miren -Dijo mirándome fijamente- Y además no le gustan los hombres... - finalizó, bajando bastante el tono de voz.
-No pasa nada, el que estaba mirando era yo y... a decir verdad ni siquiera era a ella a la que estaba mirando... -Quise decir que era inocente de los cargos que me imputaban, y me acababa de incriminar sólo con la rubia, terrible jugada!
-Ahhh... o sea que me estabas mirando a mi, no? acosador! -Me dijo riéndose sola
-Naaa... no me digas así, es que donde vivo no suelen haber chicas en tet... topless tomando sol. Soy de Rosario, Argentina, vos?
-Soy de Córdoba. Me llamo Martina.
-Yo soy Juan Cruz, un placer conocerte.
Y así nos quedamos charlando un rato, esforzándome cada segundo por mirarla a los ojos y sacar la vista de sus pechos. Su amiga volvió del mar y le dijo que se quería ir, que la acompañara. No ...
... tuve la capacidad siquiera de pedirle un teléfono (hace 23 años casi nadie tenía celular o mail) y Martina se fue con Cami caminando hacia su hotel. Yo... yo sólo me quedé pensando en que había tenido mucha suerte. No sé si había tenido buena suerte de conocerla o mala suerte de conocerla y no verla más, pero suerte había tenido.
Los días pasaron entre playa y mar y se acumulaban los momentos rodeado de mujeres semidesnudas y sin poder tener sexo. Habíamos llegado al anteúltimo día de estancia en Bombinhas y entre los 4 decidimos que era un buen momento para ir a despedirnos de Brasil en un bar de playa donde había fogones y música hasta bien entrada la madrugada. Nos preparamos y nos unimos a la fiesta. Mi hermana y su esposo fueron vestidos completamente de blanco, y se los veía muy bien. Sofía en cambio, se había puesto un atuendo más osado. Llevaba un vestido corto, que apenas le cubría el culo y, en la parte superior, muy poca tela le tapaba apenas una parte de cada teta. No tenía sostén, y realmente tenía mis dudas sobre si tenía ropa interior. El bronceado brasileño le sentaba perfecto y resaltaba con el amarillo de su ropa. Todo remataba en unas sandalias con plataforma que le estilizaban el culo y las piernas de manera brutal.
Una vez en el bar, mis 3 compañeros de viaje dieron rienda suelta a sus ganas y pidieron todo tipo de bebidas, mientras bailaban en la arena y se reían de todo. Yo en cambio, tomaba tragos menos agresivos y miraba a todo el mundo desde la ...