Fué un sábado por la mañana, me desperté bien caliente, así que, decidí revisar mi lista de contactos de whatsapp para ver quien me podía quitar esa calentura, pero nadie me contestaba por lo que decidí salir a desayunar a un restaurante cerca de donde vivo, yo vivo enfrente de un bachillerato, afuera del bachillerato siempre hay perros callejeros, pero ese día solo estaba una hembra y noté que estaba en celo por que dos perros no la dejaban de seguir, para este relato yo le pondré de nombre a la callejerita "karamelo", karamelo se paró y caminó hacia a mí como si me conociera, yo solo le silbé y le hice una seña con los dedos por lo que ella me movió la colita y se quedó parada, seguí mi camino y voltee a verla y lo que ví me dejó pensativo todo el día, lo que ví era su puchota inchada de que estaba en celo wow ¡ Todo el tiempo estuve pensando en esa pucha y eso me calentaba aun mas, para ese entonces no había penetrado a una perra por lo que controlaba mis pensamientos lujuriosos aunque era imposible, decidí seguir mi día e irme a entrenar al Gym, arreglé mis cosas, me subí a mi moto y me fuí, cuando me fuí al gym no ví a karamelo y supuse que se había ido a vagar. Siempre que llego al gym pido en la cafetería que me aparten una pechuga a la plancha con ensalada y saliendo la pago y me la llevo para cenar. Total que ese día en el gym no pude dejar de pensar en karamelo y en esa puchota tan rica que se le veía, era una sensación extraña y de repente se me paraba la ...
... verga de la exitación, terminé mis rutinas y ya no quise meterme a las regaderas por que ya era algo tarde, así que solo me cambié de camiseta, fuí por mi pechuga a la plancha y me salí , llegando a mi departamento ví a karamelo hechada junto con los dos perros , y volví a tener esos pensamientos perversos de cojermela, supuse que era mi gran oportunidad, ya estaba oscuro y no había gente que más podía pedir, metí mi moto y como no tenía nada para llamar su atención decidí darle mi pechuga a la plancha, salí a la calle y la llamé, ella me movió la colita , yo le puse un pedazo de pollo en el suelo y corrió a comérselo, los perros solo miraban alertas, entonces caminé hacia mi departamento y le mostraba el pedazo de carne y ella me seguía, abrí el portón mientras le dejaba otro pedazo en el suelo, los perros también la siguieron pero les cerré el portón justo cuando ella entró y me dije a mi mismo " ahora es mi turno de cojermela " , abrí la puerta de mi depa y le solté el último pedazo de pollo y le cerré la puerta, ella se lo devoró y movía su cola pidiendo más, pero ya no había pollo, pero había verga y eso era lo que se hiva a comer ahora. Me quité la camiseta y le puse un poco de agua en un plato y me le acerqué, era una perrita sumisa y eso me calentaba más, le acariciaba su espaldita y su cabeza , olvidé decir que karamelo era de talla mediana de color karamelo por eso el nombre, bueno, mientras la acariciaba aproveché para tocarle su pucha con mis dedos y era realmente ...