Cornudo (1)
Fecha: 20/10/2022,
Categorías:
Infidelidad
Autor: Economista, Fuente: CuentoRelatos
... pies y con los brazos en jarra se me quedó mirando desafiante.
- ¿Que tal me ves?, dijo.
- Joder Claudia, estás buenísima, dije sentado desde la cama.
Vino andando muy despacio hacia mi mientras los tacones retumbaban en el suelo de la habitación, muy despacio se sentó encima mío como hacía tiempo que no se ponía, me besó y yo le correspondí abriendo la boca para dejar que me metiera la lengua. Puse las dos manos sobre sus pechos amasando sus tetas y luego las bajé para estrujar su culo.
- Buffff Claudia, ya me vuelves a tener empalmado como el otro día.
- Mmmmm, ya lo noto, dijo ella moviéndose sobre mi para notar la dureza de mi pene bajo su cuerpo.
Pero no tardó en quitarse de encima, dejándome totalmente excitado a la par que un poco perdido, pues no sabía que es lo que pretendía, pero no tardé en darme cuenta de sus intenciones. Abrió el armario y rebuscó la caja donde tenemos guardados nuestros “juguetitos”, en cuanto la vi trastear ahí si que se me puso dura de verdad. Cogió el arnés que la había regalado para reyes una semana antes junto con un gel lubricante anal. Íbamos a estrenarlo.
Se lo fue poniendo muy despacio, sin decirme nada y unos segundos más tarde se plantó delante de mi con aquella enorme polla de juguete colgando entre sus piernas. La imagen era la hostia, Claudia con zapatos de tacón, un conjunto de ropa interior negra con su tanguita se sujetaba el pollón de goma de 20 cm acariciándolo como si quisiera ponerlo mas duro.
En ...
... esos momentos no era Claudia Álvarez, la jefa de estudios en el instituto o madre de dos hijas, aunque ya se los había puesto varias veces los arneses uno no se acostumbra del todo en ver a su mujer así y menos a Claudia, me imaginé que pensarían sus alumnos o su familia si la vieran así vestida dispuesta a sodomizar a su marido.
- Te has pasado de grande, dijo echando el gel lubricante sobre el juguete, creo que te va a doler... vamos desnúdate que te voy a follar... ¿es lo que querías, no?
Yo comencé a desvestirme y cuando lo hice lucía una erección tremenda como si tuviera 20 años que no pasó desapercibida para Claudia.
- Oyes, siento mucho lo que paso el otro día, dije yo, -no sé qué me pasó, por supuesto que tu no tuviste la culpa de nada.
- No te preocupes, que ahora me voy a vengar, jajaja.
- Te lo digo en serio Claudia, quiero pedirte perdón, me hubiera gustado follarte, pero...
- Shhhh, ¡¡cállate!!, ponte aquí de pies.
Me coloqué de pies frente al espejo de la habitación apoyando las manos en la cómoda, en esa postura le ofrecí el culo a mi mujer para ser follado. Claudia se puso detrás de mi mientras me restregaba la polla de juguete por el ano. Luego cruzamos la mirada a través del espejo de la habitación.
- Si tu no puedes follarme a mi tendremos que hacerlo al revés, ¿hoy si que se te pone dura, verdad?, dijo pasando la mano hacia delante para agarrarme la polla que estaba como una piedra.
- Lo siento mucho Claudia.
- Deja de pedirme ...