LA MAESTRA DE TUS HIJOS BIBLIOTECA - Relatos Eróticos

LA MAESTRA DE TUS HIJOS BIBLIOTECA

... hijo, si, yyyyy ayyyyy aayyyyy ahhhh ay ay asi asiiiii!!!

Ay,ay,ay,ay,ay, por Diós!! Me dejas jadeando, jadeando, ¿Cuánto tiempo paso?, cosita, me podes coger más seguido, recordame, que te deje mi celu, así nos llamamos, cógeme, cógeme, cógeme, y de repente el viejo, dio un grito, corto pero grotesco, y volvió a acabar dentro de Lorena. Y ella, dijo, cosita, me tiemblan las piernas, y cayo exhausta al lado, papi, pasaste el examen.

Que pedazo de trola, sos ¿tu marido sabe lo puta que sos?’,

Lorena, como que mucho no le gustaba, pero, ella decía, él ni sabe lo puta que puedo ser.

Y conversaron, hasta que el viejo, se la saco de dentro de ella. Y comenzaron a vestirse, chupamela, y ella seguía, como si nada vistiéndose, chupamela, dale.

Puta te estoy dando una orden, ¿Qué cosa cosita?, que me chupes la verga.

Pero, pero, dijo ella, no, no, no no, para, no ,no quiero, no ahghh ahgh haghghgghg siiiii chpa, puta, a vos hay que tratarte así, trola, reventada, moooonmmmnm nmno nooooonnon, aghghghg sos malo, me acabaste dentro de la boca, ni a mi esposo lo deje jamás que me la meta en la boca, y ni mucho menos, me acabe dentro.

Y Lorena, con esperma en el rostro, y boca, siguió vistiéndose. Toma cosita, 310087 ese es mi número. ¿Cuando quieras? Me oiste, cuando quieras?Loreeeee! lorenaaaaa!!

¿Escuchaste?, nos están buscando.Loreeeeee! loreeee!se escuchaban los gritos, de los demás docentes, esperame, te aviso, esperame, y ella corrió hacia el baño.

Y casi ...

... de inmediato, ella sale, con la cara lavada y el cabello un poco revuelto. ¿Qué te pasa nena? Nada, nada, dijo Lorenaaaa!!Solo me descompuse. Y ¡vine al baño! Todos se miraron, y fue que en ese tiempo el tal Fabián salió de la Biblioteca.

Pero también, Salí yo, ¿Cuándo Lorena me vio salir, se quedó más extrañada que de costumbre y cruzamos mirada sin mirarnos, y la vi tocarse la concha, seguro algo estaba chorreándole….quizas.

Al, otro día, horas antes del momento

del acto, jura de la Bandera de los niños de 4°, grado, de la primaria San Martin,

Lorena, tenía que leer las glosas, tenía unas cuantas preocupaciones faltando dos horas, ella aún, no podía elegir que vestido llevar, especialmente para tapar ciertas marcas, que el sexo desenfrenado de la noche anterior, le dejaron como huella en la extensión de su piel, morocha, que recién fueron evidentes al otro día, particularmente en la mañana.

Mami, ¿qué tienes ahí? cosa que provocó que nos agachemos todos juntos a ver que tenía ella que asusto tanto a la nena,

adónde pregunto, Lorena, y

ya era tarde, mi mano le tomó el muslo, si percibí, un quejido, corto, ahogado por su mano, que al mismo tiempo silenciaba toda su boca, con su propia palma en la boca, y la note que me miraba fijo, y me sujetaba la mano, para que no siga, como tratando de sostener una especie de complicidad. ¿Te duele? Amor, pregunte, y subí la mano sosteniendo el muslo, acá también te duele, y ya tenía la mano sobre su abductor, cerca de ...