1. Aventuras universitarias: Francesita me instruye (1)


    Fecha: 09/10/2022, Categorías: Primera Vez Autor: titogemi, Fuente: CuentoRelatos

    ... Susurraba suavemente palabras que no entendía muy bien, pero sonaban muy dulces en su francés natal.
    
    Al tiempo que daba ese interminable beso con sus manos masajeaba mis orejas y mis mejillas llegando a mi nuca que acariciaba acompañando su eterno beso francés, mientras yo trataba de acomodarme de modo que no se note mi erección que estaba en su máxima expresión. Cuando calmo de ese beso que me sonó eterno siguió besando mi cuello y me dijo algo como “Je le voula des que je te vu” que después me tradujo en que deseaba darme ese beso desde que me vio… y lo imagino todos estos días que me conoció... y confeso que muchos mas fueron sus sueños y muy húmedos.
    
    Noto mi incomodidad por el pantalón apretado y con mucha dulzura deslizo su mano hasta mi entrepierna, al tiempo que decía “j'aime réveiller ton pénis” (amo despertar tu pene) y en español me dijo ”no vergüenza, mira que tú también haces en mi” y con sus ojos señalo vergonzosamente bajo su camisa desabrochada un brazier juvenil que mostraba sensuales pezones muy inflamados y duros... y suavemente se acercó a mi boca y comenzó a besarme nuevamente pero ahora sus manos acariciaban mi pene sobre el pantalón, primero lentamente luego más frenético y en algún momento deslizando mi cierre para estar más cerca de un miembro que estaba siendo desvirgado por una francesa atolondrada y deseosa.
    
    Mis manos se fueron a sus pechos que no encontraron resistencia a mis caricias notando su firmeza… hermosas tetas como no había ...
    ... soñado en mis mejores imaginaciones con sus pezones pequeños pero muy duros y firmes.
    
    Mis labios se deslizaron a su cuello en algún momento impulsados por Lore misma que deseaba mis labios en sus pechos, los bese frenético, tome cada uno de sus pezones y los besaba humedeciéndolos. Fue ella misma que con su mano los tomaba para que mis labios los soben… y entrecortadamente me pedía que mi “lengua” recorra sus pequeños corchitos como un mimo entre mordiscos que también pedía… se estremecía ante mis mimos y vi que en algún momento soplaba sus pezones… la imite provocando placer en Loreley que gemía mientras mi pene muy duro y erguido era juguete de su mano… y ella me decía “pene lindo… jetaime”, hasta que no aguante más… ya explotaba… y como pude lo dije… me acabo… sale… y me respondió “Si, lait para mi... para mi” y entendía que aceptaba… que estaba acabando en interminables chorros que terminado en sus manos que ahora acerco a mi pija que aun terminando permanecía dura afín a mis jóvenes años, y se quedó jugando con ella en la calma que sobrevino a la tormenta que pase.
    
    Fue a lavarse y arreglarse saliendo de mi dormitorio. Al regresar comenta que mi madre estaba en la cocina, lo cual era sabido por mí, pero en esos momentos no estaba para razonar mucho… es sabido lo que mal intencionadamente dicen que el hombre no tiene sangre suficiente y cuando se llena el pene deja de razonar.
    
    Me abrazo muy dulcemente y me dijo “¿Gustó? ¿Mucho? ¿Quiere más? Soy mimosa y me quede con ...