Fecha: 02/10/2022,
Categorías:
Hetero
Autor: Mr. Mer, Fuente: CuentoRelatos
... le dije que la esperaba allá... Me dirigí a la cocina mientras veía como ella se negaba a seguirme la corriente pero no hice caso a su negativa y le indique con la mano que la esperaba en la cocina... Pasó menos de un minuto cuando ella llegó y ya yo tenía mi verga fuera del pantalón, ella abrió los ojos de sorpresa y me dijo con voz baja que si estaba loco, que nos iban a encontrar... Yo sonreí y le dije que no perdiera tiempo y comenzara a hacerme la mamada, ella se negó pero yo la halé por el brazo y le puse la mano en mi verga mientras la besaba, le dije que no perdiéramos tiempo y ella sonrió y se hincó comenzando a mamar.
La adrenalina estaba al máximo, ella me estaba haciendo una mamada mientras su hermana dormía a pocos metros de nosotros, se notaba su nerviosismo y le indiqué que quería se apoyara de la meseta de la cocina para yo penetrarla desde atrás, ella se negó rotundamente y yo la abracé desde su espalda para posicionarla como quería, era muy excitante tenerla dominada mientras que ella se negaba pero se dejaba hacer, cuando toque su vulva estaba empapada y posicioné mi verga para penetrarla pero escuchamos los ruidos de la cama y supimos que su hermana se había despertado, rápidamente nos recogimos y yo me senté en el comedor para disimular mi erección, su hermana entró a la cocina y dijo con voz burlona "tengan cuidado con lo que inventan, ya yo les dije a ustedes" (o sea, que reiteraba la prohibición de tener sexo en su apartamento).
Nosotros solo ...
... sonreímos y no dijimos nada, su hermana volvió a la habitación y ella y yo nos dirigimos al otro extremo de la sala de estar donde hay un balcón, ya estaba oscuro y le dije que debíamos aprovechar que tenía vestido y que ningún vecino estaba en los demás balcones del edificio, ella sonrió y abrimos las cortinas de la puerta del balcón para que si su hermana salía por lo menos nos diera tiempo de arreglarnos la ropa y disimular...
Así que nos sentamos en el mueble del balcón y ella comenzó a hacerme sexo oral de nuevo, era más excitante hacerlo donde alguien más pudiera encontrarnos y no deje pasar mucho tiempo cuando le pedí que se subiera sobre mi dándome la espalda, así lo hizo, movió su pantaleta a un lado y ella misma se ensartó en mi verga, era delicioso, comenzó a hacer movimientos de va y ven mientras yo trataba de moverla de arriba hacia abajo, el mueble era un banco de metal y hacía pequeños chirridos con cada movimiento, yo no le di mucha importancia solo quería follármela hasta acabar dentro de ella.
Ella se agarró fuerte de los hierros del balcón quedando un poco alzada frente a mi, entonces yo podía moverme libremente así que ahí comencé con la embestidas fuertes mientras ella trataba de ahogar sus gemidos...
Así estuvimos un rato hasta que ya no pude más y me vine dentro de ella, justo en esos segundos escuchamos a su hermana llamarnos, la suerte fue que las cortinas nos tapaban porque al ella moverlas no nos dio tiempo de acomodarnos así que mi ex novia ...