Fecha: 30/09/2022,
Categorías:
Primera Vez
Autor: Cristian 1980, Fuente: CuentoRelatos
Han pasado exactos 2 años desde que ocurrieron los hechos que les relaté. Y casi año y medio desde que los tres vivimos juntos en mi casa. Laurita tiene 20 añitos recién cumplidos y su madre está pronta a cumplir 39. Hemos tenido sesiones interminables de placer, descubriendo formas de llegar al orgasmo que nunca antes habíamos imaginado ni menos probado. Con Laura somos actualmente pareja formal, por lo cual Laurita pasa en todos lados como mi hijastra, pero dentro de las paredes de mi casa somos 3 amantes. Es verdad que entre ellas no han tenido sexo jamás, pero han estado muchas veces al mismo tiempo recibiendo placer de mi parte, ambas desnudas en mi cama.
La primera vez fue la noche que se mudaron a vivir conmigo.
Yo había follado con ambas, pero siempre de forma separada, a lo mucho la otra había estado mirando, pero nunca habían compartido un acto sexual. Pero esa noche cuando llegaron a vivir a mi casa las cosas fueron distintas. Cenamos liviano y luego comenzamos a beber unas botellas de vino, al poco andar Laura se sentó en mis piernas y comenzamos a besarnos.
Laurita nos dijo que tenía un poco de sueño y que se iría a acostar para dejarnos solos. Eso hizo. Su madre luego de besarme comenzó a lamerme por todos lados como tanto le gusta, centrándose en mi polla que ya estaba muy dura. Luego de eso subimos a mi cuarto y comenzamos a follar de manera intensa. Laura comenzó a gemir mucho y muy fuerte, quizás producto del vino que habíamos bebido o tal vez con ...
... otra intención. Yo entraba por todos sus orificios y la culeaba como un animal. La cama golpeaba la pared que da al cuarto de Laurita de manera reiterada y sonora, lo que me hacía que me calentara más y más, esperando ansioso que ella escuchara y ocurriera lo que pasó.
-por favor, no puedo aguantar, yo también quiero -esas fueron las palabras exactas que dijo la niña, parada desde la puerta de mi pieza. Yo salí del interior de su madre para ir a buscarla tomándole su mano con suavidad. La acerqué a la cama y comencé a besarla en los labios, mientras, sin que me diera cuenta, su madre se arrodilló entre ambos para volver a mamarme. Así estuvimos un rato, hasta que sentí que iba a eyacular.
-Cuidado, voy a acabar -les dije. Laurita me miró y sonriéndome me contesto:
-Hazlo, acaba en su boca mientras me besas, te queremos compartir, ya lo hemos conversado -al dejar de hablar volvió a besarme apasionadamente, mientras su madre me dejaba que la siguiera follando por la boca. Mi orgasmo fue brutal. Saber que la madre te lo chupa mientras besas a la hija es algo increíble. Nunca soñé con vivirlo.
Luego de mi orgasmo caí rendido en mi cama. Las dos se abalanzaron a mi lado y se reían, me decían que debía aguantar más si quería satisfacerlas a las dos, y comenzaron a bromear por quien lograba ponerme duro de nuevo. Laura se sentó en mi cara y Laurita bajó nuevamente a lamer mis huevos. No sé quién lo logró, pero me puse duro nuevamente. Tomé a Laurita de las caderas y la ...