Fui perrita de un prestamista segunda parte - Relatos Eróticos

Fui perrita de un prestamista segunda parte

A los dos días de mi encuentro con David, nos volvimos a ver cuando visité en el Preventivo a mi esposo, es una especie de pre-prisión, es decir alli llegan los que aún no tienen sentencia. Solo estan detenidos. Me topé con que David estaba hablando con mi esposo. David me hizo una sonrisa pervertida cuando lo saludé. Mi esposo me comentó que esperaba que todo se arreglaría, me dijo que David lo estaba ayudando con algunas influencias de personas que eran sus amigos. -Ese David si es amigo!- me repitió mi esposo. Yo apenas le contesté. Cuando salimos de alli, iba a pedir un taxi, pero David me dijo que me llevaría a casa. El condujo y se detuvo frente a la casa, me preguntó que había pensado de su oferta, yo le dije -eres un desgraciado!-, él se sonrió y me dijo que yo tenía morosidad de pagos y él tenía la garantía de nuestra casa. Me quedé en silencio, solo moví la cabeza afirmativamente. Entonces el hizo su sillón para atras y desabotonando su pantalón sacó su verga que estaba semi-dura, me dijo que quería que se la mamara en ese momento, luego de negarme y decirle muchas cosas, me fui recostando y me metí su verga en la boca y comencé a mamarsela, noté que su verga se fue endureciendo dentro de mi boca, hasta casi no caberme; asi también sus manos acariciaban mi colita y mis piernas. Metió su mano debajo de mi falda y luego dentro de mi braga, sentí sus dedos acariciar mi rajita, de repente siento uno de sus dedos dentro de mi vagina, entrando y saliendo. Su verga ya ...

... estaba totalmente erecta, me dijo -vamos al sillón de atras-, como su carro es grande no costó nada pasarnos hacia atras, me puso sobre sus piernas de frente a él. Sacó mis tetas y comenzó a mamarlas, sin dejar de chuparlas, hizo a un lado mi braga y puso su verga en la entrada de mi vagina y me penetró. -Cabálgame!- me ordenó. Comencé a moverme sobre su enorme verga mientras el chupaba mis pezones. Aunque era contra mi voluntad, me estaba mojando en serio, la fricción de su verga dentro de mi vagina me estaba excitando sin remedio y su boca mamando mis senos. En un momento lo oí gemir a David, asi que aceleré los movimientos de mi pelvis, quería llevarlo al climax rápido, lo malo era que yo también me estaba llevando a ese momento. Primero él y luego yo comenzamos a dar de gemidos y quejidos y cuando sentí que estaba por disparar su leche, levanté mis caderas para dejarlo salir, pero David me tomó de los muslos y me hizo hacia abajo y se derramó de nuevo dentro de mi, su pene dio varios latigazos de semen que sentí dentro de mi vagina. Al terminar, me levanté y le dije que era un maldito, que yo no quería que terminara dentro de mi, pues no uso anticonceptivos. Me compuse la ropa, y salí de su auto con dirección a mi casa. A los cuatro días de esto, me sentía rara, compré un producto para saber si estaba embarazada y salió positivo, tuve que comprar una inyección para causar el desprendimiento del ovulo y maldije al tal David. Tomé el teléfono y le conté eso al mismo momento que ...