1. Nuria y los negros


    Fecha: 25/01/2022, Categorías: Dominación / BDSM Autor: Anónimo, Fuente: RelatosEróticos

    ... libre.
    
    --¡Virgen santa!—gimió--¡No os cansáis, dejadme ya!
    
    Pero la idea de acabar ahora le supo mal, su cuerpo no la obedecía, deseaba más pollazos.
    
    Vio como Mohamed acercaba su nardo a su boca y lo deseó, mucho más grande y extraordinario que el de cualquier vagabundo.
    
    --Aquí va, profe—dijo.
    
    --Ahaa—abrió ella la boca para recibirlo.
    
    La polla le supo extraña, goteaba precum y sabía que pronto recibiría la corrida de aquel negro.
    
    Un tipo con barba y tripa gorda se dispuso a follar su coño, apretó sus tetazas al metérsela, empujándola con fuerza, y siguió dándole empujones violentos, casi la estaba matando con ese pollón, pero a Nuria le gustaba, además, ahora sus tetas se veían mejor y todos podían disfrutar de ellas.
    
    Nuria comenzó a pajear a Walid y Basil, que a pesar de haberse corrido sus pollas podían darle una nueva lechada, jamás en toda su vida había estado tan excitada, tan puta, no dejaba de correrse, no se reconocía allí, en esa ola de sudor y semen.
    
    Los vagabundos que estaban manoseando su cuerpo follado la rodearon y comenzaron a masturbarse mientras escupían en su sucio e indecente cuerpo, Nuria gimió ante el tacto de los esputos sobre ella.
    
    --Toma, profe—gimió Mohamed agarrando su cabeza—Siii, que bien, te quiero, puta, sii.
    
    Se corrió en grandes cantidades, pero no dejó de mover la cabeza adelante y atrás y el semen salió de su boca disparado, no obstante si pudo tragar algo, porque fue rápida, le gustaba tragarlo y lo hizo, su ...
    ... sabor era intenso, era algo cremoso, que se metió entre sus muelas, mojó su lengua y bajó por su garganta llenándola, como marcándola.
    
    Dio un grito cuando su boca quedó liberada, se tumbó exhausta mientras sentía como el barbudo se corría dentro de ella, cuando se apartó el semen goteó de su sexo al suelo.
    
    Otro ocupó el lugar de su coño y fue embestida de nuevo, ella gritaba porque ahora podía hacerlo, uniéndose a los demás gritos y jadeos.
    
    --Ah, ah, no puedo más, cuanto… va a durar…
    
    Walid yBasil, que estaban siendo masturbados por ella, se acercaron a su boca, uno por cada lado, Nuria la abrió para recibir el semen de ambos, que no tardó en llegar.
    
    --Si, tía—gritó Walid—Trágalo, trágalo.
    
    Las dos pollas se corrieron como grifos, llenaron su boca abierta y después mancharon toda su cara, su cuello y su pelo.
    
    --Pollas negras—pensó ella en medio de aquel salvaje placer—No puedo dejar de mamarlas.
    
    Inmediatamente, seguramente cachondos de mas al ver ese bukake, los demás comenzaron a correrse sobre ella, llenando sus tetas y su vientre, su coño y también fue rellenado por dentro por última vez. ¿Última vez? Pensar eso le hizo sentirse infeliz.
    
    Cuando todos descargaron su semen sobre ella, la dejaron, Nuria se quedó allí, tumbada, follada, llena de corridas ajenas por todo su cuerpo, por dentro y por fuera, entonces se dio cuenta de lo que había hecho.
    
    --Dios—pensó--¿Por qué he hecho esto? ¿Yo no soy así?
    
    Los mendigos se marcharon, quedaron de nuevo ...