Algo que no buscamos - Relatos Eróticos

Algo que no buscamos

Empezaba a aburrirme sentía la rutina de todos los días, el mismo movimiento, el mismo olor, las mismas cosas, pero eh de confesar que trabajar en un parque de diversiones tenia lo suyo, las risas no faltaban, uno que otro niño demasiado eléctrico por subirse a los carritos chocones, algún padre sobreprotector intentando que su hijo no se monte en algún juego que para ellos es peligroso.. Y así pasaban mis días entre palomitas y algodón de azúcar…

Me llamo Abigail una chica como describirme.. Sincera, divertida, un poco loca, soñadora y muy callada… digamos que hablo lo necesario eso dice mi mejor amiga Victoria..

Victoria tiene la misma edad que yo 24, aunque ella es morena y yo blanca, una gran persona a la cual podría llamar hermana…

Ella abogada más que por excelencia, cuestión familiar, su madre abogada, su padre fiscal, no le dejaron muchas opciones, aun no entiende porque trabajo en un parque..

_Abigail sigo sin entenderte, porque sigues trabajando hay?

_Vicky el trabajo no es malo, un poco aburrido entre semana, pero me gusta (hay me encontraba mintiendo de nuevo).

_Aun puedes retomar tu carrera.

_Me encanta almorzar contigo todo es tan tranquilo aquí.

_Abigail, no me cambies el tema, Que es lo que tanto esperas?

_Vicky por favor!! Hablamos un millón de veces sobre lo mismo, cual es el apuro, sabes que en menos de 2 años estaré graduada y con honores, conseguiré trabajo en un gran consultorio prestigioso, estaré atendiendo a tantos ...

... pacientes que seguramente no podre verte seguido, es eso lo que quieres? No verme más…

_Sabes perfectamente que eso no es lo que trato de decirte, no me harás sentir mal con tu juego de palabras, obviamente tu profesión, para lo que estas echa, sale a relucir como siempre.

_Cuéntame cómo esta Adriana? desde hace dos días no la veo.

_Claro! Ella está bien un poco apretada con tanto trabajo, pero sigue igual de adorable que siempre, ohm mm esta pasta esta riquísima, no entiendo como sigues comiendo eso…

_Y que tiene mi ensalada cesar? Es deliciosa y saludable, si sigues comiendo así tus noches de pasión serán otras.

_JA ja ya quisieras tener mi metabolismo Abigail, sientes envidia solamente

Había que admitirlo esa mujer podría comerse una vaca y seguir 60, 90,60, un cuerpo al que no había tocado ningún cirujano y sus ojos color azabache eran la combinación perfecta para una abogada tenaz como Victoria Dugarte

Yo por otro lado no la envidiaba, comía sano eso me llevaba a tener un buen cuerpo, no me sobraba, pero tampoco me faltaba nada todo en su respectivo lugar, mis ojos color ámbar, heredados de mi madre era lo que más me gustaba de mi misma..

Al finalizar el almuerzo, Victoria me dejo en mi trabajo y se dirigió a su despacho, llegue muy puntual como siempre, faltando 5 minutos…

_Abigail, Abigail l!!

_Dígame Sra. Ana, ya me dirigía a mi puesto de trabajo.

_No Abigail, Laura no viene hoy y sabes que el carrusel siempre es el más solicitado, ve y ...