El secreto de Hugo (su padre)...
Fecha: 19/05/2018,
Categorías:
Gays
Tabú
Autor: renovatio111, Fuente: xHamster
... bajar.Noté el calor de su cuerpo y su camiseta de tirantes, ligeramente mojada, rozando mi espalda. Y percibí que el tío que tenía detrás empujaba suavemente su cadera y rozaba mi culo con su paquete, que noté semiduro. ¡Madre mía! pensé, o estaba muy salido o ese tío estaba intentando decirme algo sin palabras. Por la vía de los hechos.En esa posición, pude aspirar el suave olor que desprendía su sudada y que hizo que mi polla se activara repentinamente, sintiendo un enorme calor que recorrió mi cuerpo y provocándome una leve erección. Mis mofletes me ardía.-Vamos a volver a intentarlo, pero ahora con más fuerza, dijo Raúl.Si, ponte exactamente aquí, y su compañero me agarró de la cintura y me apretó contra la lavadora. Ahora cuando yo tire de abajo, tu coges de arriba y haces fuerza hacia ella- me indicó. A ver si ahora podemos.Volvimos a intentarlo y cuando Raúl contó tres, sonriendo a su colega, yo hice esfuerzo contra la lavadora, de manera que mi culo golpeó completamente su paquete que ya estaba completamente tieso. Noté un rabo gordísimo que se pegó completamente a la raja de mi culo. Uff, no podemos- dije con sinceridad, pensando en escapar de esa situación tan incómoda. El tío que tenía detrás estaba completamente empalmado con la polla tiesa y ardiente en mi raja.-Si, si, claro que podemos, haz más fuerza, y presionó su cadera contra mí, encajándome en la lavadora.Estos tíos quizás, si se estaban insinuando se lo tomaran como una broma para humillarme, así que ...
... me escabullí por debajo de sus brazos y les dije que había que buscar otra solución. Era mejor no m*****arlos con mis hormonas desatadas, y si pensaban que era marica, probablemente me soltaran un guantazo.“Joder Keko, es la primera vez que no podemos mover un bicho de estos”- le dijo Raúl sonriendo al otro que tenía la mano en el paquete sobándose la polla como sin nada. Así de pie, el chulazo, tenía una polla tiesa completamente recta dentro del pantalón de Adidas que ofrecía un espectáculo al que nadie podía aludir que no era intencionado.-Esto es la ostia. ¿Tienes agua fría?, prosiguió Raúl, para sacarme de mis pensamientos. En tu casa hace un calor del carajo.-”Si claro”, asentí, y Raúl, en un salto rápido, cruzó por encima de la lavadora y entró en la cocina de nuevo. Me siguió hasta la nevera.Abrí la puerta de frigorífico y se puso detrás de mí, a mirar en su interior, por encima de mi cabeza.“Ahora que veo... Mejor un par de birras que veo que tienes mogollón en la nevera. A que apetece una birrita, tron”. Le dijo a su compañero con tono de chulería. Ahora sabía que el que rozó la polla se llamaba Keko. ¡Ufff qué calor!- déjame un poco que me de el frio de la nevera, anda. Asentí.“Claro, una birra mejor que agua, que cojones”- dijo el tío de los tautajes.Estuve a punto de decirles que eran de mi padre, pero las vistas y los roces que me estaban pegando bien se merecían una cerveza para esos dos especímenes de machos. Así que, atrapado entre la pared y la puerta de la ...