La última con mi primo al lado de su hermano dormido
Fecha: 25/04/2018,
Categorías:
Gays
Autor: Anónimo, Fuente: SexoSinTabues
... completo. Como ambos llevábamos ya nuestra pijama, fue fácil meterle la mano bajo el pantalón y agarrarle con la mano derecha el culo, mientras seguíamos con los besos. Le sobaba y apretaba las nalgas y metía mi dedo medio en su ano, que estaba muy caliente. Le saque la mano del culo y me fui hacía su cintura, mmm una cinturita de ensueño y con firmeza comencé a acariciarle todo el torso. Mi primo tenía cuerpo de niño aún, seguía sumamente delgado y a mí me encantaba eso. Esau que para ese entonces ya tenía su mano en mi verga, la saco por un instante y subió la camiseta de ambos hasta la altura del pecho, quedando ambos torsos casi desnudos. Otra cosa que nos gustaba mucho también, era sentir nuestros torsos desnudos abrazándose, por obvias razones no nos arriesgamos a quitarnos la camiseta como en otras ocasiones, pero nos conformamos con abrazarnos fuerte así. Después como pude, nos baje a ambos el pantalón hasta la altura de los muslos y ahora si podíamos sentir nuestros cuerpos desnudos casi por completo, de los más rico que hay sin duda. Hasta ese entonces yo todavía no había sentido su verga pero cuando chocó con la mía supe que ya no tenía la misma verguita que se cargaba el año anterior. Quite mi mano que se había posicionado nuevamente en su culo y la lleve hasta su verga. Comencé a experimentarla con mi mano, ya estaba grande. De unos 14 cm pero lo mejor de todo GRUESA. Me lleve la mano hacia sus huevos que estaban aguados colgándole debajo. Me prendí cañón. ...
... Seguíamos besándonos, seguíamos parando de vez en cuando para cerciorarnos de que nadie había despertado y no había ruidos cerca. Al tiempo que nos besábamos nos la empezamos a jalar, los dos nos movíamos hacia el frente con la cadera y los besos y saliva no paraban. Ambos soltábamos pequeños gemidos de placer y a veces soplábamos en el oído del otro. Mi primo bajo su boca hasta mi verga y como ya era costumbre comenzó a mamármela. La verdad es que no era muy hábil, pero se sentía muy rico, sólo podía mamármela en la cabeza, el resto ya no le cabía en la boca. Yo le sobaba el cabello y estaba al pendiente de que Raul, que estaba super cerca de nosotros no se despertara. Dentro de un rato se cansó de mamármela y subió poniéndose sobre mi. Su verga estaba encima de la mía que ya estaba algo mojadita y yo le acariciaba la espalda y las nalgas, después paro de besarme y me dijo al oído, métemela. En ese momento no se porque me saco de onda, pero recordé lo que había pasado la ultima vez que lo había intentado, me apendeje y le dije te va a doler. Hice que se me bajara de encima y se acostara como estaba al principio de costado. Me baje yo hasta su verga y comence a mamarsela, a diferencia de el yo si me la tragaba toda. Le lamía los huevos y se la llenaba de mucha saliva. Sus gemidos de placer apenas y los podía controlar y después de un rato me levante y le dije metemela tu. La verdad es que siempre yo si tenía ganas de que me metieran un verga por el culo y ahora era el momento ...