Fecha: 18/06/2017,
Categorías:
Sexo con MadurasHardcore,
Tabú
Autor: aristurman, Fuente: xHamster
Mi sensual mujercita cumplió treinta años y para celebrarlos, hizo más de un festejo. Uno fue a solas conmigo; otro con sus amigas y finalmente, otro con sus compañeros de trabajo.La noche que festejó con sus compañeros de trabajo fueron a cenar y después a un boliche a bailar. Yo me quedé solo en casa, esperándola.Cerca de las tres de la mañana recibí un mensaje de texto, diciéndome que estaba regresando a casa con Josefina y Camilo, en el auto de Ramiro.Me despreocupé y volví a cerrar los ojos, conciliando el sueño otra vez muy rápidamente. Me desperté sobresaltado y verifiqué que ya eran pasadas las cinco; pero Lorena todavía no había llegado…Comencé a ponerme nervioso, ya que esa situación no era normal.No quise llamarla, para no parecer pesado.Pero un rato después ya no pude aguantarme y directamente marqué su número. No me contestó después de varios intentos, lo cual comenzó a intranquilizarme un poco…Cerca de las seis por fin oí que intentaban abrir la puerta de calle. La risa de Lorena me tranquilizó un poco; pero de la borrachera que tenía, no podía acertar la llave en la cerradura.Le abrí la puerta y mi delicada mujercita casi cayó en mis brazos.Sonriendo débilmente y con un hilo de voz algo entrecortada, me dijo que estaba todo bien, dándome un beso de lengua apasionado.Pude sentir un sabor extraño en sus labios; mezcla de alcohol, tabaco y… algo más que podría ser…semen…Antes de que yo pudiera reclamarle algo, Lorena se deshizo de mi abrazo y, caminando con ...
... cierta dificultad, apoyó sus manos en las paredes y se dirigió a nuestra habitación.Desde atrás pude disfrutar ver el suave balanceo de sus redondas caderas; algo que siempre me ha excitado.Pero también noté algo extraño: Lorena llevaba unos pantalones blancos bien ajustados a su cuerpo, marcándole bien las redondeces de su hermoso y firme culo. Estaba manchado o mojado, no podía verlo bien…Fui hasta la cocina por un vaso de agua y luego me dirigí al dormitorio.Al entrar encontré a Lorena desmayada boca abajo sobre la cama, totalmente vestida. Le dije que se desvistiera, pero ella balbuceó algo incoherente y no atinó a moverse. Tendría que desnudarla yo mismo…Le saqué la blusa de seda negra, los zapatos de taco aguja y finalmente los pantalones. Entonces pude comprobar que, no solamente estaban manchados, sino también mojados por dentro…Toqué la zona de la entrepierna y la consistencia del líquido me dejó estupefacto: era semen, de manera inconfundible…Me quedé unos minutos sin entender nada, solo mirándola desmayada sobre la cama. Era evidente que mi infiel mujercita había cogido con alguien sin usar un forro; le habían acabado adentro y se había puesto los pantalones sin limpiarse…Le quité su diminuta tanga de algodón, que también estaba empapada con una mezcla de semen y fluidos vaginales. Evidentemente, le habían descargado una buena cantidad de leche adentro de su concha.Tenía manchados también los muslos y hasta su estrecha entrada trasera.Toqué suavemente su concha, que ...