La amiga viuda de Carmela
Fecha: 22/04/2018,
Categorías:
Infidelidad
Autor: murgis, Fuente: CuentoRelatos
... quitara esa pena, ella solo se reía “jajá “Juan porque donde yo vivo es una barriada donde nos conocemos todos y no quiero dar que hablar a la gente, por eso cuando me dijo Carmela que ella con su marido nada de nada y que te tenia a ti, para follar y además con la ventaja de no tener miedo a quedar embarazada por ti vasectomía vi el cielo abierto y quedamos hoy para conocerte y si me gustabas que me lo hicieras a mí también si a ti no te importa porque de Carmela tengo su consentimiento de compartirte.
Todo esto me lo estaba diciendo sentada en frente abriendo y cerrando sus piernas, yo estaba cachondo perdido me levante bajándome la cremallera de pantalón y sacándome la polla y acercándome a ella se la puse a la altura de su boca.
Silvia no dudo en echar el pellejo para atrás y dejarme fuera mi capullo que estaba echando ya del calentón que tenía el líquido pre seminal, que Silvia lamia como si estuviera chupando un helado decía “que rico leche desnatada cuanto tiempo hace que no la pruebo“ yo sabía que solo esperaría a que se me pusiera bien dura, porque de no ser así me iba a correr entero en su boca.
Carmela al llegar con el jamón y la vio comiéndome la polla solo dejo “a esta le gusta más tu polla que el jamón jajá” Silvia se sacó la polla de la boca y dijo, “Carmela comeros vosotros el jamón que yo me como este flamenquín rico que tengo en la boca” y siguió chupando, yo para distraerme algo comencé a comer y a tomar la cerveza porque tenía ya hambre de comer ...
... más que de follar y sabía lo que se me venía encima.
Carmela soltó el plato y empezó a quitarme el pantalón y la camisa, cuando lo hizo se metió entre mis piernas pasándome la lengua por los huevos y apartándole las braguitas a su amiga para también comerle el coño a su amiga, yo sabía que de esta forma iba a aguantar poco a pesar de lo duro que soy para correrme, pero a los 5 minutos de estar así, Silvia se levantó y se quitó las bragas y la camiseta, y se me puso de espaldas para que se la metiera en su coño que estaba ya chorreando de su hambre de polla y de las lamida de su amiga, Carmela me cogió la polla y se la dirigió a su amiga a su coño , empezó a pasarlo por su raja húmeda pero cerradita por el tiempo que llevaba sin usarlo, Carmela decía que tenía ya tela de araña jajá, ya con mi capullo bien mojado lo puso en la puerta para que yo empujara y así lo hice porque estaba bien estrecho, al notar la entrada dio un pequeño saltito y solo dijo “ay, ay despacito, que está cerrado” y así lo hice con la ayuda de Carmela que la muy cabrona lo que decía que si no se la metiera a ella para engrasarla bien y luego darle a su amiga, a lo que contesto Silvia “Carmenchu no sea egoísta y déjamelo a mí que ya tendrás tu ración” y así fue como poco a poco llegue a clavársela entera a lo que cuando la amiga le llego hasta el fondo grito” joderrrrrrr que me corro, que me corro que rico que hambre tengo sigue, sigue muévete sácala y métemela de pronto sigue sigue sigue que gusto ay lo ...