Ya soy el puto del equipo (IX)
Fecha: 09/04/2018,
Categorías:
Infidelidad
Autor: janpaul, Fuente: CuentoRelatos
... nuevo el míster estaba serio y a mi parecer ya vislumbraba su propia caída del pedestal donde él mismo se había colocado.
Yo pensaba que un equipo de fútbol necesitaba un preparador, que nos exigiera, nos entrenara y nos diera técnicas, normas y trucos para el combate. Me lo imaginé siempre como el general de un ejército llamado para la victoria. Pero un general sin soldados no gana batallas y un entrenador sin jugadores no gana partidos. Llegué al equilibrio, nos necesitábamos, necesitábamos un equipo cuyos jugadores tuvieran seguridad en sí mismo y con unas líneas claras para el combate en el campo de juego. El entrenador estaba jugando para sí mismo, lo que buscaba de los jugadores era carne fresca, sexo, placer… Nada había que hacer ya con este hombre. Me propuse ser el alma del equipo, no por los conocimientos, sí por el entusiasmo. No desdeñaría las normas y técnicas del míster, pero para mí había acabado de ser Gunnar mi amigo. Sus días estaban contados.
Pedí a Marcos que me ayudara a recoger las cosas. Se nos unió, como si conociera mis planes, Luis Calvero que se trajo a Marcelo Sebastián. Acabamos pronto la recogida de todos los trapos y prendas y nos pusimos a ducharnos en ristra, éramos cuatro uno en cada ducha. Parece que el agua en lugar de refrescarnos nos calentó. Yo observaba a Marcelo de reojo, pero él no dejaba de mirarme, y eso que estaba en la cuarta ducha. Una de las veces que lo miré estaba fijamente mirándome. Le hice una señal para que se ...
... acercara. Pasó por entre las duchas y le dio una palmada en el culo a Luis Calvero y luego repitió con Marcos. Estaba claro que podríamos entendernos.
— ¿Qué te gusta que tanto me miras?, —le dije poniendo mi mano sobre su hombro.
— Me gusta tu polla.
Miré la suya y nada tenía que asombrarme, pero me pareció un chico que podría entrar en el círculo de mis amigos y le dije:
— Tienes el mejor culo del equipo, además de tu triángulo de hombros a cintura. Me gustas.
— ¿Qué hacemos?, —preguntó mirando a los otros dos.
— No hay problema, ellos se van a juntar y van a hacer de las suyas; ¿eres activo o pasivo?
— Pasivo, ¿y tú?
— Versátil.
Se puso sin pensarlo de rodillas a mamarme la polla y quité el agua de mi regadera. Sobre el suelo mojado nos pusimos en 69 y mientras me comía majestuosamente mi polla le fui preparando el culo. Cuando ya vi que estaba bien caliente y soltaba gemidos sonoros sin parar, decidí enderezarme y tomándole de la cintura lo puse en cuatro y me dio su culo. Poco a poco lo penetré hasta el fondo procurando hacerle el menor daño posible, aunque gemía de dolor y placer. Mientras tanto estaba mirando a Marcos y Luis que estaban preparándose mediante una sucesión de besos sonoros. Pronto se colocaron en posición y Marcos se puso de cara a mí follando a Luis, nos mirábamos Marcos y yo y pensábamos que ya teníamos la mitad del equipo formado. Acabé dejando mi esperma en el recto de Marcelo, saqué mi polla y me puse a besarlo hasta que expulsó ...