Papá dormido en el sofá
Fecha: 27/03/2018,
Categorías:
Incesto
Autor: Anónimo, Fuente: RelatosEróticos
Entre en casa con los tacones en la mano y el vestido más arriba de lo normal, cabreada, acalorada y excitada. Después de pegarme la noche bailando provocando y dejando que me manoseara aquel hombre, resulto que estaba casado y una urgencia en casa tuvo la culpa de que yo me quedara empapada y con ganas de sexo. Al levantar la cabeza vi a mi padre dormido en el sofá, con un vaso de whisky en una mano mientras que en la otra para mi sorpresa agarraba su polla aun morcillona. Me acerqué despacio y sin hacer ruido, en la tele una rubia culona y de tetas grandes montaba a un negro con un rabazo enorme que le estaba taladrando el culo mientras mi padre roncaba. Miré sin pudor su polla y me resultó tentadora, me puse de rodillas y me di cuenta de que aun relucía, se había corrido hacia muy poco.
Me acerque un poco mas y la olí, un escalofrío recorrió mi cuerpo y apreté las piernas inconscientemente. Llevé uno de mis dedos cuidadosamente y recogí una gota que aún reposaba en su capullo, lo llevé a mi boca y lo saboreé, en aquel momento me pareció el mayor de los manjares que mi paladar hubiera saboreado asta entonces. Se movió y me eché hacia atrás asustada, pero me tranquilice al ver que no abría los ojos.
Volví ha acercarme y pasé mis dedos despacio por el tronco asta los huevos y los cogí con mi mano despacio, con delicadeza, acariciándolos con mis dedos, los solté y sin ser consciente de lo que estaba haciendo cogí la polla de mi padre y empecé a pajearle, despacio pero ...
... con firmeza. Notando como poco a poco empezaba a cobrar vida y se endurecía en mi mano. Aceleré el ritmo mientras mi mano se deslizaba por mi coño de arriba abajo por encima de mis bragas, haciendo que se metieran entre mis labios mojándose enteras.
No me podía creer que estuviera haciendo eso, dejé su polla y quité la mano de mi coño. Me quedé sentada frente a la polla dura de mi padre, MI PADRE, estaba mal pero algo en mí me empujaba a volverlo a tocar, a saborearlo... Estaba excitadísima y quizás no debiera hacerlo, pero quería comerme aquella polla que me apuntaba desafiante.
Acerqué mi boca y sacando la lengua la pasé tímidamente por su capullo apenas rozándola, ningún movimiento, lamí el tronco de su polla de abajo arriba y el seguía sin responder, algo que me llenó de confianza y me llevó a coger el capullo entre mis labios, y poco a poco bajar por su polla asta la mitad y volver a subir despacio para que no se despertara. Agarre sus huevos con una mano y acercando mi boca los succioné uno detrás de otro antes de lamerlos y morderlos suavemente. Volví a metermela en la boca, esta vez con más confianza, extasiada con la situación sin el más mínimo deseo de parar lo que estaba pasando. De repente mi padre subió la cadera he hizo que su polla llenara por completo mi boca, me pilló tan de repente que una arcada me obligó a sacarla. Respiré y volví a engullirla, subiendo y bajando mis labios por ella, notándola palpitar, llevé mis dedos a sus huevos y masajeándolos se ...