Fin de semana de a tres - Relatos Eróticos

Fin de semana de a tres

Mi nombre es Fernando, estoy casado con Daniela hace 6 años, ella es una morocha muy sensual con un cuerpo que a cualquiera le levanta la temperatura con solo observarlo.

Hace dos meses atrás aproximadamente, vino de visita un amigo mío que vive en el interior, se llama Carlos, y vino a pasar 2 o 3 días a Buenos Aires, asi que le ofrecí quedarse en casa mientras estuviese por aca.

La primera noche nos fuimos a acostar y al otro día nos levantamos temprano y nos fuimos a la pileta aprovechando el sol y el calor. Daniela se puso una bikini que la parte de arriba eran dos triangulitos diminutos que solo tapaban sus pesones y la parte de abajo se perdía en su culo como un hilito. Luego de estar un buen rato al sol nos metimos los tres en el agua a refrescarnos y a nadar un poco. Carlos por mas que disimulaba no podía ocultar como sus ojos se desviaban al culo y los pechos de Daniela. Luego de un rato salimos y comimos algo, y por la tarde lo llevamos a Carlos a comprar algunos regalos para su familia. Mientras el hacia sus compras, Daniela aprovechaba y buscaba alguna ropa para ella, en un negocio vio un par de prendas que le gustaban y entro a probarlas, una era una blusa sin mangas con un escote hasta por debajo de sus pechos y semitransparente, de gasa blanca, y una minifalda que tapaba un poco mas abajo de donde empieza su culo. Carlos al verla asi se quedo duro, se le notaba en la cara las ganas de disfrutar de ese cuerpo un rato.

De vuelta en casa el se dirigió ...

... al cuarto de visitas y se fue a preparar para salir a la noche, habíamos planeado cena y baile en algún boliche.

Daniela y yo hicimos lo mismo y nos fuimos a nuestro cuarto, mientras ella se bañaba yo me afeitaba y le comente como había visto a Carlos comérsela con la mirada, y ella me respondió que se había dado cuenta varias veces y que cuando volvíamos en el auto se había humedecido de pensar en ello. Yo me sonreí y no le dije nada mas pero a mi en el fondo me calentaba toda esta situación.

Fuimos a cenar y luego a bailar a un boliche en la costanera, durante la noche tomamos bastante y estábamos todos un poco borrachos, Daniela estuvo bailando toda la noche con los dos , de vuelta en casa , como a las cinco de la madrugada, llegamos y con la alegría que teníamos no nos queríamos dormir, asi que abrimos una botella de champaña y fuimos a nuestro cuarto los tres a ver unos videos de cuando éramos mas jóvenes y mientras los veíamos Daniela se durmió asi vestida como estaba en el medio de la cama, su blusa con el escote totalmente abierto dejaba asomar sus pechos casi hasta sus pesones ya que no tenia corpiño, y su pollera levantada hasta dejar ver su tanguita . Esto era algo que calentaba a cualquiera y Carlos y yo tardamos muy poco en clavar nuestras miradas en este cuadro hermoso.

Le hice un gesto a Carlos para que observara y le corrí la blusa a Daniela un poco hasta que dejara ver sus pesones, empecé a acariciarlos y enseguida se endurecieron y empezó a hacer ...