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Siempre lo había deseado…
Fecha: 17/06/2017, Categorías: Infidelidad Autor: andr2001oid, Fuente: RelatosEróticos
... Buenos días. ¿No querrías ducharte sin mi verdad? – Y abrió la cortina y entró conmigo en la bañera. Tenía la cara cnsada pero esbozaba una enorme sonrisa. La besé en los labios y la puse bajo el agua calentita. - Qué buen despertar que es este – comentó. Duchita de agua caliente preparada, una gran compañía y un besito húmedo en los labios... – Con esas palabras os podéis imaginar mi sonrisa, yo estaba en la gloria. Nos abrazamos bajo el agua y nos besamos con mucho cariño. Cogí el champú y empecé a enjabonarle el pelo, ella se dejaba hacer mientras se lo limpiaba y le masajeaba la cabeza y la espalda. A todos nos gusta que nos mimen ¿verdad? Ella jugaba con mi pollita pequeñita entre sus manos mientras yo la acariciaba. Cuando terminé de enjabonarla ella misma se puso bajo el agua y terminó de quitarse el jabón del pelo y de la cara mientras yo me sentaba en la ducha viendo ese cuerpo que cada vez me parecía más hermoso y esa sonrisa de pícara que me observaba mientras se aclaraba. - ¿sabes? Ayer fue un dia maravilloso y hoy no tiene por qué ser diferente. Ayer cumplimos algunas de nuesras fantasías pero aún quedan muchas más – Yo no podía creer lo que estaba escuchando, era increïble, cuando más le daban más quería. Me levantó del asiento, me pegó a su cuerpecito y me dijo que había sido maravilloso hacer el amor conmigo, que le había encantado beberse mi leche y que le había encantado como la había follado, que además de ser tierno era un poco salvaje y que eso le ...
... gustaba. Me besó en los labios metiendo su lengua hasta el fondo de mi boquita mientras acariciaba mi polla con su mano y al separarse de mi me empujó al asiento y me dijo que le encantaría sentir de nuevo mis labios en su clítoris. No tardé ni dos segundos en acercarla a mi y en poner mis labios en su cinturita mientras el agua caliente salpicaba pero no me caía en los labios. A pesar de que algo de jabón había pasado por su cintura aún olía a sexo pero no me importaba en absoluto. Ella movía sus caderas despacito y me apretaba la cabecita a su cintura y me decía suavemente – qué placer, no pares amor, me encanta – Sigo besándo su cuerpo y disfrutando muchísimo de ese aroma a sexo que voy ingiriendo y excucho como me dice – tengo una fantasía que nunca he realizado y me encantaría cumplirla contigo – a lo que yo respondo – Si tu no la has cumplido no creo que yo lo haya realizado pero me encantarà probar cosas nuevas contigo – y me dice – deseo hacerte una lluvia dorada ¿te atreves? – Nunca me la han hecho ni nunca me lo han propuesto pero en ese momento le dije – Será una nueva sensación y me muero por vivirla contigo – En ese momento me levanté y nos besamos apasionadamente mientras su mano me masturbaba con intensidad, se veía que estaba muy excitada. Me mordió los labios, succionó mis pezones y me chupó la puntita de la polla tres veces hasta metérsela hasta el fondo en dos ocasiones y después volver a besarme en los labios y decirme mirándome a los ojos – prometo que habrá ...