pervirtiendo a una nena inocente 14
Fecha: 24/01/2018,
Categorías:
Incesto
Autor: adalberto1979, Fuente: SexoSinTabues
... aguas fluyan por sí mismas y sobre todo hazle caso en todo lo que te diga ‐ Jajaja gracias por lo que me toca Alvarado se sintió aliviado, ya llevaban 2 horas platicando, miró el reloj y decidió que era tiempo de irse ‐ Gracias Joaquín, no sabía a quién acudir ‐ No te preocupes mi hermano, total si te corren seremos dos en este palacio jajaja ‐ Jajaja Alvarado se puso de buenas, Joaquín lo había tranquilizado y hasta lo había hecho reír, si hubiera sido algo gay lo habría besado, pero no había que exagerar las cosas ‐ Me retiro y seguimos en lo mismo ‐ Ok, descansa y mañana me cuentas que pasó *********** Margarita escuchó cuando Alvarado su flamante esposo salió de la casa, se sentía como su hubiera sido doblemente infiel, había sido traicionada por su esposo y su propia hija, no sabía que le podía más, si el hecho de que él se fijara en otra mujer o el que fuera su hija, la cual sabía era hermosa y mucho más joven, ¿cómo podría competir con eso? Camino por el pasillo de la segunda planta, no quería regresar a la habitación para no toparse con su esposo si regresaba y tampoco quería estar con Diana, se sentía enojada y sobre todo muy celosa de ella, solo quedaba una habitación, la de Samuel. Abrió lentamente la puerta y se metió en la cama de su hijo mayor, el adolescente sintió el movimiento y despertó ‐ ¿Qué pasa mamá? ‐ Hijo ¿me permites dormir contigo? Por favor, sólo esta noche ‐ ¿Estas llorando? ¿Te peleaste con papá? ‐ Si, peleamos y no quiero dormir con él ¿me ...
... dejas dormir aquí? Prometo no molestarte ‐ Si mama, ven Samuel amaba a su mamá, admiraba y respetaba a su papá pero amaba a su mamá sobre todas las cosas, levantó las sábanas para que ella se metiera debajo, su mamá era su adoración y sintió deseos de ir a golpear a su papá por hacer llorar a su madre, Margarita tímidamente se acostó de lado dándole la espalda, con una mano limpiaba sus lágrimas y con la otra sujetaba la sábana. Samuel se acomodó atrás de ella y la abrazó, lo hiso de amor puro y verdadero, tratando de consolarla, ella giro su rostro hacia él y sintió la tibia boca que beso sus ojos, como tratando de secar sus lágrimas. ‐ Ya no llores mamá, mañana se resolverá todo. Margarita se sintió confortada por su hijo mayor, tenía demasiadas cosas en la cabeza, ira, tristeza, decepción, celos, envidia, más coraje, todo al mismo tiempo, pero ahora sólo sentía el confort de su hijo, el único que no la había traicionado. Trato de dormir, pero no podía, cerraba los ojos e imaginaba a su esposo e hija en las posiciones más aberrantes del mundo copulando como condenados, posiciones que nunca le haría a ella, cosas que jamás harían juntos, ella recordó el sexo anal cuando él se lo pidió y ella simplemente lo botó, le daba asco, pero ahora en imaginación su hija se lo ofrecería y lo disfrutaban, ella quedaría fuera de la jugada por recatada y negada. ¿Sería ese el problema? ¿Ella no era lo suficiente hembra para satisfacerlo? ¿Cualquier escuincla mugrosa lo llenaría más que ella? ...