1. los dias de sofá


    Fecha: 21/01/2018, Categorías: Incesto Autor: daldieb1818, Fuente: SexoSinTabues

    ... jóvenes tendrían mejores cosas que hacer, me dijo, lo de vida saludable quedaba para los viejos como el, y como yo, agregue sonriendo. -no eres viejo- me dijo- ¿cuánto tienes, 30 a lo sumo?- dijo jadeando por el trote que llevaba -34, le dije. – ¿ves? eres aún muy joven- me guiño el ojo, a lo que le respondí sonriendo -si yo no lo soy, tu tampoco, te ves mejor que otros hombres de… que edad tienes 40?- de echo tenía 44, viudo desde hace como 11 años, con un hijo de 19, y mucho tiempo libre. Un hombre de fácil conversación. Estuvimos un rato más en la caminadora hasta que decidí terminar el… ¿coqueteo? Me despedí y volví a casa, claro Dayana me riño por la hora, la ignore lo mejor que pude y termine de nuevo en el sofá, estaba tentado a ir a la habitación de James, pero todo el día me estuvo rondando la culpa, era mi hijo, y lo que había echo no estaba bien, excitante, sí, pero equivocado a mas no poder. Al día siguen te las cosas entre Dayana y yo estaba muy frías, no me dirigió la palabra y yo no intente acercarme, tome el desayuno (que yo mismo prepare) con los chicos, hable con James y las niñas, que estaban emocionadas porque su “hermana mayor” vendría esta tarde a pasar una semana de vacaciones, esto era nuevo para mí, Gina no ocultaba su desagrado por mí (Gina es la hija de mi esposa) lo que me suda la polla, (las dos cosas) así que propuse a los chicos salir al cine, más tarde. Claro Cayana se encabrono, al parecer sí que estaba prestando atención a lo que todo lo ...
    ... que decía, lo que nos llevó a discutir frente a los chicos, en fin, digamos que las facciones mostraron sus verdaderos colores, James se vino conmigo y las niñas con su madre. Pasamos un día genial. Hablando de la escuela, sus amigos, y de nuestro mutuo desagrado a Gina. Estaba el miércoles de esa semana en el gim, tratando de llegar lo más tarde posible a casa, casi todos ya se había marchado, solo quedamos Richard y yo, me propuso entrar al sauna del gim, nunca había ido. Como la urgencia de no estar en casa me urgía decidí ir, estaba en un pasillo un tanto oscuro al fondo de las duchas, era una especie de sótano, él se quitó su habitual lycra y yo procedí a lo mío, solo estaba cubierto con una pequeña toalla blanca que apenas cubría su entrepierna se encamino a la pequeña recamara, se sentó con las piernas abiertas en un banco largo de madera pegado a la pared y palmeo el sitio junto a él. En el que me senté también. No dijo nada, solo estuvo allí recostado en la pared con los ojos cerrado, respirando uniformemente, me quede apreciándolo, las gotas de sudor y vapor corriendo por todo su cuerpo sus hombros, su pecho y cuando baje a su ingle había una enorme tienda de campaña, en la mía también claro. Abrió los ojos girando su cabeza hacia mí solo me miro, me arme de valor y estire su mano hacia su polla, apretándola por sobre la toalla, el solo cerro sus ojos y dio un largo suspiro, tome como una invitación así que quite la toalla para tener acceso a su polla. Era… hermosa, ...