CONSUEGROS - Relatos Eróticos

CONSUEGROS

... que comenzaba a entrar.Otra vez su voz:
:"¡¡Para,para,Carmelo,"eso"no va a poder
   entrar en mi culo,sigo pensando que te
   ha crecido ...¡¡y muchoooo!!aayyygg.No
   noo,sacalaa,ayyy,Carmelooo!!Me estás
   desculandooo!!.Parate hijo de aaauyy!! 
  me estás matando,me rompes el culo".-
Carmelo me hacía señas que yo siguiera enterrandole mi cañón en el orto que ya presentaba una imagen deformada y abierta.Al momento de que mis muslos se juntaron con los de ella,se empezó a escuchar el característico cachetes,yo la bombeaba metiendo y sacando el tubo de dentro de su orto,suave y apretado.-En el momento de mayor penetración y sin que yo lo esperará,Marcelo con un solo manotón,despegó la venda que cubría sus ojos.Al principio,Irma no pudo
entender nada.Veía a su marido frente a ella,mientras,una,enorme,verga le estaba
taladrando su orto a una velocidad y con una fuerza desconocida.Él sonreía cuando mirándola a la cara le dijo:
:"Durante años,me negaste tu orto,ahora
  te lo está rompiendo otra pija".-
Ella empezaba a entender la situación,
su marido le había entregado su culo a otro hombre,aún,no me miraba.Giró su cabeza.Me vio,tomó una decisión.Dijo:
:"Vos querías,ver como me rompían el 
   culo.Yo te voy a ofrecer un espectáculo
   que,seguro,no esperabas".-
Mientras se empezaba a hamacar como si estuviera poseída,chocaba su orto contra mi pija,embutiendosela,hasta el mismo tronco dentro de su cavidad anal.
De su garganta su voz ...

... ronca,gritaba:
:"¡¡Todaaa,Miguel,metemelaaa,todaa!!!
   reventameee el culooo".-
Yo,por supuesto,no me hice repetir la orden y me la empecé a culiar como si fuera el fin del mundo.Mi,hinchada,pija entraba y salía de su orto como si fuera un pistón.Ella aullaba como una perra herida,mientras,me suplicaba que se la metiera hasta el fondo,cosa de la que se encargaba ella misma con semejantes empujones que se daba contra mi tronco
No recuerdo haber presenciado y mucho menos haber producido un orgasmo anal de iguales características.Su cuerpo
temblaba y tiritaba con contorsiones que no puedo describir.Su voz era una sola mezcolanza de gritos roncos y súplicas.
Podía ver como su zorra,chorreaba su placer que corría abundante por entre sus muslos,mientras,las contracciones de sus pliegues anales me proveian de una acabada inolvidable.Cuando terminó
se desplomó agotada sobre su cama.Su cuerpo subía y bajaba al ritmo de una respiración que le costaba recuperar y me ofrecia una imagen de ese orto que acababa de desflorar,mientras,mis jugos de placer brotaban generosos del gran boquete en el que se había convertido su cerrado agujero.Mi leche se deslizaba por sus muslos y en su ruta se mezclaba con su goce.
Yo,no estaba en distinta condición.Mi verga,aún,goteaba parte de mi placer ,sobre sus piernas.Carmelo permanecía,
sentado en un rincon.Todavía su mano 
enroscaba su verga que,aún,se movía lentamente,arriba y abajo,pero,su pija 
goteaba denunciando que ya había 
llegado a destino.-
Resulta una ...