CONSUEGROS - Relatos Eróticos

CONSUEGROS

... media hora sin conseguir que me calme,giro buscando otra posición.Al hacerlo tengo ante mi la espalda de mi consuegro,pero,no es ahí donde se centra mi mirada.No puedo evitar que mis ojos ubiquen el culo redondo y
desnudo a centímetros de mi pija,que está como un fierro duro y caliente.Los cierro con la intención de retomar el control sobre mis pensamientos,pero,me resulta imposible apartar de mi mente esa redondez tan cerca de mi excitación.
En la medida que la calentura empieza a reemplazar a mi razón,lentamente,me quito mis calzoncillos y me acerco a ese cuerpo que puede aliviar el dolor que me punza la entrepierna.Estoy,casi,pegado. Compruebo que su respiración sigue siendo acompazada y,ya,despojado de todo raciocinio,asiento la cabeza de mi pija entre sus muslos.Con mucho cuidado la refriego por su piel,la muevo entre sus piernas.Inesperadamente,la mano de Carmelo,se mueve hacia atrás y captura mi mástil encendido.Quedo por completo paralizado,pero,su voz me dice
:"Tranquilo Miguel.Yo soy responsable de
   esta situación.Corresponde que yo me
   haga cargo y te ayude".-
Sin que,yo,lo pueda creer,su mano rodea mi verga que empieza a pasar por la calidez de sus muslos.Lo dejo hacer.Mi necesidad es demasiado exigente.Debo descargar mi calentura.En su afán de ayudar a,ese fin,Carmelo,separa sus piernas,coloca el embolo hirviendo entre medio y las vuelve a juntar aprisionando
mi excitación entre sus muslos.Sus caderas empiezan a moverse friccionando y aumentando ...

... mi dureza.
Ya,totalmente,desprovisto de toda razón,
mis manos aprietan sus nalgas,las abren
las separan y apoyo mi cabeza en su entrada y ejerzo presión.Su vos suena ronca,densa,temerosa cuando me dice
::"No Miguel,eso no.Tu pija me va a hacer
   daño".-
Su culo se contrae,impidiendo cualquier posibilidad de acceso.Mi voz es súplica
:"Por favor,solo la punta.Te lo prometo,
   Pero,déjame meterte la cabeza.Acabo 
   y te la saco".-
Pasan unos,interminables,segundos.Su culo se relaja y sus manos abren sus nalgas,y lo levanta.Presionó otra vez. Después de intentarlo varias veces no puedo entrar.Empiezo a desesperar.
Necesito meterle,aunque más no sea la cabeza,pero,no lo logro.
Carmelo,lleva su mano atrás,vuelve a enroscar mi pija,dirige la cabeza hasta su entrada,la apoya justo en su entrada y pega un empujón brutal,hacia atrás.La cabeza de mi verga se ha deslizado de manera grosera dentro suyo.Siento latir su culo alrededor de mi verga.Siento sus gemidos y el rechinar de sus dientes
apretados.Gime,jadea,gruñe.Yo continuo metiendosela.La imagen de su orto, dilatado de manera bruta,mientras se devora el grueso tubo que desaparece poco a poco,endurece,aún,más el trozo de carne que,ya,sin límites impuestos ni por él  ni por mi,le voy enterrando hasta que mis muslos quedan adheridos a los suyos.Su voz es apenas un susurro dice
:"Por favor,por un instante,no te muevas
  sé que la tengo toda adentro,pero,por
  favor,déjala quieta un momento.Me has
  destrozado el ...