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EL DOCTOR HUGO VELÁZQUEZ Y SUS PRINCESAS. Cap II
Fecha: 25/04/2021, Categorías: Fantasías Eróticas Tus Relatos Autor: verdolaga, Fuente: Relatos-Eroticos-Club-X
... mucho y cuando él le pidió que se relajara entraron unos tres centímetros de lengua lo que casi vuelve loca de placer a la niña. Llevó su mano a la conchita de ella y le acaricio el pequeño botón y empezó a sentir su humedad en ella. Le metió algo de su dedo sin llegar al himen y Paulette tuvo otro orgasmo, el segundo del día que su padre bebió. Ya no soportaba la dureza de la verga al grado que llegaba a dolerle, pensó que otra mamada no la toleraría así que se decidió. Le rompería el culito a Claudia. Hablo con loa dos sobre lo que iban a hacer, le explico que i no aguantaba el dolo se lo dijera, que lo haría lo más suave posible. Claudia se colocó boca abajo con el culito levantado a petición de él, que sacó el lubricante y la crema de un cajón del buró. Él le abrió las nalguitas y le hizo lo mismo que a Paulette y cuando le metió unos centímetros en el culito se incorporó, le aplico el lubricante y se colocó detrás de ella. Empujo muy levemente y ante su sorpresa entro el glande por completo, sintió lo apretado del recto de su hija y sintió un gran placer. La niña se quejó un poco. -Ayyy……papito…….me duele…….. -¿quieres que la saque? -No papi, aun aguanto………despacito nada más. Empujo un poco más y en total le entrarían entre 5 y 6 pulgadas, tal vez 5 ...
... y media, lo que lo maravilló pues nunca pensó que entraría tanto en la primera vez. De pronto el placer le gano. Había enculado a muchas mujeres, entre ellas a su difunta esposa, pero ninguna la había dado el placer que el culito de su hija le daba. Apretaba lo que tenía dentro de una manera muy fuerte a pesar del lubricante y cuando el empezó un ligero mete y saca la niña empezó a sentir placer moviendo sus nalguitas. El cuidaba mucho no penetrarla más pero el placer casi lo hacía enloquecer. De pronto la niña empezó a sentir la llegada de un orgasmo apretando su coñito lo que se reflejó en su culito que apretó de una manera bárbara, lo que hizo que su padre se vaciara en él. Fueron tres o cuatro grandes chisguetes de semen que inundaron el ano virginal como un homenaje paterno. A pesar de lo caliente del esperma la niña sintió que su culito se relajaba más y se reconfortaba y entonces Hugo, con su experiencia, fue sacando poco a poco la verga del ano de su hija para que no le doliera. Al salir venia embarrada de algunas heces fecales que olían algo fuerte pero a nadie le importó. Fueron al baño donde se asearon y después Hogo aplico la pomada analgésica al culito de su hija y se dispusieron a dormir los tres juntos y desnudos, como seria de ahí en adelante.