Fin de semana apoteosico
Fecha: 02/01/2018,
Categorías:
Sexo con Maduras
Autor: lujuria69, Fuente: xHamster
... personas de ambos sexos que estaban aglomeradas contemplando el espectáculo. Entre ellos vislumbré a mi marido y al resto de mis habituales folladores. Me sorprendí a mi misma sintiéndome orgullosa de la exhibición sin el menor asomo del pudor que sería propio de una señora madura, casada y con hijos, de costumbres sociales aparentemente respetabilísimas y, sobre todo, deforme embarazada de ocho meses.Después de que los dos hombres me inundasen con su semen por ambos conductos, Inés me introdujo un tapón anal en cada agujero con la intención de llevarme a un reservado. Susana se apuntó al número que esperaba y recibió su premio no sin pelear con Inés. Ambas me hicieron abrir mis agujeros estando de pié para poder beberse el semen almacenado junto con mis jugos.Terminamos haciendo un fisting doble a Susana, yo por el desarrollado coño y la manita de Inés por el dilatado culo, mientras comentábamos con risas los detalles de la jornada, lo que la disfrutamos y lo agotadas que estábamos, sobre todo yo con mi barrigón.De regreso a casa, a las cinco de la mad**gada, Antonio no estaba de buen humor, pero supongo que no se atrevía a decirme nada suponiendo que Susana me habría contado como se pasó todo el tiempo aferrado a sus inmensos muslos y comiendo los labios de su chorreante coño, pero que su verga no había funcionado. Caí muerta en la cama sin fuerzas para dar un beso y arropar a mis niños.- - - -Segunda jornada: Sábado.A las diez de la mañana, todavía sin reponerme de la ...
... extraordinaria noche anterior, recibí una llamada de mi jefe:Estaba de viaje y me pedía que a las cinco de la tarde me presentase en el hotel FK, habitación 69, para exponer a una comisión de cinco clientes de la empresa HACO inc. el proyecto que habíamos confeccionado para su implantación en nuestro país. Que se habían presentado imprevistamente o que había fallado un fax de anuncio de la visita. Que uno de ellos ya me conocía de las conversaciones preliminares y que exigía volver a tratar conmigo, máxime sabiendo que estaba preñada de ocho meses. Los demás componentes de la comisión estaban de acuerdo.El párrafo anterior no se comprendería si no me explicase mejor:Mi jefe es un perfecto inútil para negociar. Él es mi amante con conocimiento de mi marido, quien también sabe que los negocios de mi empresa se consiguen a base de mi cuerpo. Mi jefe verborrea y yo convenzo por otro conducto, ya que generalmente los productos o proyectos que queremos vender son deficientes, si no infortunados. En fin, hago de puta de la empresa y todo el personal lo sabe y me está agradecido por mantener su fuente de ingresos. A ninguno es le ocurriría reprocharme nada.A la hora fijada, después de dejar a mi marido en el cine con los niños y recomendarle llevarlos a cenar al McDonalds, llamaba a la puerta de la habitación prefijada. Allí había tres hombres blancos y otro y una mujer negros. Nos presentamos formalmente comentando con el que ya conocía la marcha del negocio que llevaba conjuntamente ...