1. En manos de dos perversos (3)


    Fecha: 16/06/2017, Categorías: Sexo en Grupo Autor: señoreduardo, Fuente: CuentoRelatos

    Había descubierto cuánto me excita ser dominado, humillado y abusado sexualmente…
    
    En ese momento entró don Ángel…
    
    -¿Y, María? ¿Para cuándo esa paliza? Quiero que me lo entregue con las nalguitas bien rojas para que yo le meta mi verga hasta los huevos…
    
    -Ya empiezo, don Ángel y usted mire para que la verga se le ponga bien dura…
    
    -Ya la tengo bien dura, María… Ya de verlo así al nene, desnudito y en sus rodillas, la tengo dura como la piedra…
    
    En ese momento me cayó el primer chirlo, fuerte, rotundo… Gemí y la “señorita” me ordenó:
    
    -Contá en voz alta cada chirlo, Jorgito, y después decí “gracias, señorita”… -y volvió a pegarme, esta vez en la nalga izquierda…
    
    -dos… gra… gracias, “señorita”… -dije con esfuerzo porque de tanta excitación hasta me costaba respirar…
    
    La paliza siguió y yo loco de goce, sintiendo un dolor delicioso y notando un voluptuoso calor en mis nalgas, tan sabiamente maltratadas por la “señorita”…
    
    -Bien, María… ¡Muy bien!... Me excita ver cómo se va coloreando ese culito…
    
    -Jorgito tiene un hermoso culo, pero así, coloradito, es más lindo todavía, ¿cierto, don Ángel?
    
    -¡Claro, María! ¡siga pegándole! ¡quiero ese culo bien rojo y caliente cuando le meta la verga!...
    
    -Así se lo voy a entregar, don Ángel, jejeje…
    
    Y así estaba mi culo cuando pasé a manos de don Ángel, que ya se había desnudado y exhibía ante mí su verga bien erecta…
    
    -De rodillas, nene… -me ordenó… -Porque antes de que te la dé por el culo me la vas a ...
    ... chupar…
    
    -Sí, don Ángel… -murmuré sintiéndome deliciosamente sumiso y por completo en poder de ese perverso…
    
    Abrí la boca y me la metió ahí tan profundamente que me provocó arcadas… Él rio sádicamente, pero enseguida la hizo retroceder un poco, lo justo para que yo empezara a chuparla…
    
    -Tomé viagra, ¿sa… sabés, Jorgito?... Así que… no voy a… a tener ningún problema en llenarte la boca de leche y… y después de un descansito dártela por… por el culo… -me dijo entre jadeos mientras yo seguía chupándosela alentado por la promesa…
    
    La “señorita” estaba sentada en el borde la cama, mirándonos con expresión morbosa…
    
    -Cuando Don Ángel acabe tragás todo, Jorgito, hasta la última gota… Mirá que te voy a revisar la boca y pobres de tus nalgas si veo algún resto de semen ahí… ¿Entendido?...
    
    Le hice una seña con la cabeza y seguí apasionadamente con la tarea de chupar esa verga dura que palpitaba dentro de mi boca…
    
    Por fin don Ángel me agarró del pelo, con fuerza, y me soltó en la boca varios chorros de semen caliente y sabroso, que yo tragué todo y quedé arrodillado, a la espera de la inspección de la “señorita” mientras don Ángel se echaba de espaldas en la cama a reponer fuerzas…
    
    -Parate, Jorgito, y abrí grande el hocico… -Obedecí y pasé exitosamente el examen, después del cual la vieja me ordenó que volviera a ponerme en cuatro patas a la espera del siguiente abuso por parte de don Ángel…
    
    No tardó mucho el viejo en recuperarse –efectos del viagra, seguramente- y ...
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