49.3 Cosas de jóvenes
Fecha: 25/12/2017,
Categorías:
Gays
Autor: Albany, Fuente: CuentoRelatos
... hablar con los muchachos unas palabras.
Gonzalo guardo su tarjeta y el papel e hizo un gesto para que tomaran asiento y se sirvieran una copa, me acerqué a su oído para que me oyera lo que le iba a decir.
-¿Y éstos que hacen aquí? -me tenía intrigado.
-Son para ti.
-¿Para mí?, ¿estos dos chicos?, ¿dos prostitutos?… -reí nervioso en su oído.
La conversación era un secreto entre nosotros, aunque hubiéramos hablado separados no hubieran podido escucharnos.
-No son prostitutos, se trata de strippers.
-¿Y para que les quiero yo, quieres que hagamos un número con ellos? –su risa es burlona y sarcástica.
-Te he dicho que son para ti.
-Deja tus bromas Gonzalo, no sé lo que pretendes. –me abraza y continúa riendo.
-Quiero que te enseñen a bailar, o que tú aprendas uno de sus números para hacerlo para mí. –en ese momento llega una preciosa chica pelirroja y con el pelo ensortijado a la que Gonzalo invita a sentarse, ahora entiendo para quien era la copa que estaba sin dueño.
-¿También una chica? -es imposible creer la que está organizando.
-Las chicas tienes algunos movimientos que los chicos no hacen bien y ofrecen otro cuerpo.
-Gonzalo, estás loco, ¡Oh! Dios mío. –vuelvo a besarle en la mejilla, parece que le estoy cogiendo gusto a su barba.
-Cuanto te ha costado este numerito. –no sé qué pensar de él.
-Eso no es importante, ahora vamos a bailar que para eso estamos aquí. –me coge de la mano y me lleva hasta la pista, los tres strippers o ...
... bailarines vienen detrás de nosotros contoneándose al ritmo de la música, nos rodean bailando a nuestro alrededor y poco a poco voy entrando en ambiente.
Mueven sus cuerpos maravillosamente y se encargan de dirigirnos y llevarnos, nos cansamos y bailamos abrazados, ellos no parecen tener límite y continúan con el baile rozándonos provocativamente. Es fantástico como lo estoy pasando. Abrazo su cuello y se tiene que inclinar para que le hable al oído.
-Gracias, mi amor es una noche fascinante, te adoro. -suspira gozoso de haber acertado y me besa apasionado, subiendo mi cuerpo sujetándome por mis nalgas para que llegue a sus labios.
Cuando dejamos a los tres alegres chicos y contento de su trabajo les entrega unos billetes. Luego nos consiguen un taxi.
-Qué ocurrencia mi vida, ha sido un regalo impensable y al principio me asustaste. -rompió en una risa alegre y el taxista nos miraba por el espejo sin entender nuestro alborozo.
-Mañana iremos a Cranfield tengo que cumplir la promesa que le hice a Jean y enviarle el regalo, tenemos que dormir un poco. –voy de sorpresa en sorpresa y no deja de admirarme.
---------------------------
Miraba a Wes sin terminar de abrir los ojos, adormilado y deseando continuar en mi sueño, estaba recogiendo el desastre de ropa que dejamos anoche tirada de cualquier manera.
-Buenos días Wes. -giré mi cabeza buscando a Gonzalo.
-Está en el baño. –fue su rápida respuesta sin dejar de trabajar, tenía preparado el desayuno en ...