Tigre hotel (parte 1 de 2)
Fecha: 12/12/2017,
Categorías:
Erotismo y Amor
Autor: dulces.placeres, Fuente: CuentoRelatos
... que no tendría posibilidad de fracaso, aunque estuviese en juego tener que acostarse con nuestro amigo casual.
Esa noche aprendería una importante lección, nunca hay que subestimar a un oponente, como un tonto inocente entré en su juego, caí en su trampa, todo lo tenía planeado, en ese último partido noté desde el principio que Enrique me llevaba la delantera. ‘mágicamente’ había aprendido a jugar y manejaba la situación a su antojo, noté que en verdad sabía jugar muy bien y que solo había simulado no saber hacerlo. Fue lo suficientemente astuto para llevar parejo el partido, sin tratar de gozarme en ningún momento, cuando metió la bola negra supe que todo había acabado…
-Tío… suerte de principiante – dijo, pero los tres sabíamos que era mentira
Mi hermosa mujer no salía de su asombro, mirando con ojos exorbitados y adivinando como deberíamos pagar nuestra apuesta, Enrique tenía una sonrisa libidinosa en su rostro, y yo quedé mordiéndome los labios en mi impotencia.
Traté de cambiar las cosas, de disuadirlo, pero el español nos había engañado…
Me apretó fuertemente la mano, como caballeros y me deseó buenas noches, tomó de la mano a Morena y gentilmente la llevó a su lado, los vi desaparecer por el largo corredor que daba a las habitaciones, ella en silencio se alejó de mi vista, casi sin mirarme y yo, como un estúpido, esperando que la puta de mi mujer se negase.
Fui a la barra pedí otro trago, y otro más, rebobinaba la historia una y otra vez, no podía ...
... creer lo de mi esposa, siempre me decía que era único para ella, que no podría estar con otro hombre, que no podría serme infiel, y sin embargo, en la primera oportunidad, se iba a coger con este viejo que podría ser su padre…
A las tres de la mañana fui de regreso a mi habitación, la cama parecía enorme en ausencia de Morena, no podía sacarla de mi mente, la imaginaba haciendo el amor con el viejo, maldita, maldito, malditos…
La estará pasando bien? estará disfrutando? Y si le gustara demasiado como la cogiera este tipo? Los fantasmas de las dudas rondaban en mi cabeza, sentía pánico, y si fuera la primera vez de muchas futuras veces, o peor aún, y si no fuera la primera vez?
La amaba demasiado y el miedo a perderla se hacía sentir como un frío puñal atravesando mi corazón.
Y que estarían haciendo? Se la estaría mamando? Estaría gimiendo como puta? Estaría gozando?
El cansancio al fin me venció y tuve horribles pesadillas, me despertaba a cada rato, trataba de abrazarla pero era en vano, ella no estaba…
A las seis de la mañana ya estaba nuevamente de pie, solo en mi habitación, bajé a desayunar tan rápido para encontrarla que caí en la cuenta que aún no eran las siete, hora en que habrían el bar por la mañana.
Me senté intranquilo en una mesa, solo, solo en mi soledad, observando como las camareras daban los últimos retoques.
Al fin pude comenzar con mi desayuno, café con leche, facturas, queso y dulce, un jugo de pomelo y un yogurt de frutilla.
Tomé ...