1. Desafío de galaxias (capitulo 37)


    Fecha: 01/07/2017, Categorías: Infidelidad Autor: calvito, Fuente: CuentoRelatos

    ... Opx— ¿Qué cojones es eso?
    
    —El torpedo, cuándo explosiona, crea una singularidad gravitacional que atrae lo que está en su cercanía.
    
    —¿Cómo un agujero negro?
    
    —Si, pero limitado y temporal. Os he traído dos…
    
    —¿Dos? —la interrumpió Opx con guasa— ¡Que derroche de medios!
    
    —¡No seas bobo! Tenemos material para construir diez y esos dos son los primeros. Es extremadamente laborioso construirlos y hay varios componentes muy raros y difíciles de encontrar, producir y sintetizar; de hecho, uno de ellos solo lo hay en Magallanes. Pensad muy bien como los vais a utilizar.
    
    —¿Y exactamente como funciona?
    
    —Crea un vórtice magnético de tal intensidad que atrae todo lo que este, o entre, en un radio de cincuenta kilómetros, y dura unas dos horas. La atracción es tan descomunal y potente, que las naves se aplastaran unas con otras, se apelmazaran.
    
    —Tus amigos de Rulas 3, desde que confiaste en ellos para lo de los Deltas, no dejan de dar sorpresas agradables, —dijo Opx.
    
    —Los contratos militares les han venido muy bien, estaban en las últimas, y además, han sabido desarrollar su propia tecnología. En I+D están a tope. el MARK-5 es enteramente suyo.
    
    —Estos nuevos torpedos, pueden ser ideales para atacar sus formaciones cerradas, —a Loewen se la veía encantada—. Se van a cagar por la pata abajo.
    
    —Eso creo yo, —afirmó Marisol riendo—. Lo hemos montado en un torpedo inteligente que puede calcular rutas hasta un objetivo.
    
    —¿Cuándo los recibimos?
    
    —En una ...
    ... semana. También vendrán varios ingenieros de Rulas 3 para informar de las especificaciones.
    
    —¿Entonces os vais pasado mañana como estaba previsto?
    
    —Si, si, quiero ir al Sector 73, —respondió Marisol—. Tengo que pasar la mano por el lomo a los de Galaxy Green. Como ha dicho antes Anahis, están de los nervios.
    
    —Además, las cifras de refugiados se están disparando, —dijo Anahis— están saliendo kedars hasta de debajo de las piedras, cuándo la noticia de la evacuación se ha propagado, y algunos llegan es un estado lamentable.
    
    —Si, hemos tenido que reforzar considerablemente los equipos médicos que ya tenemos allí, —añadió Marisol
    
    —Lo comprendo, —dijo Loewen— pero es una lastima, a los chicos les mola que estés con ellos.
    
    —¡Coño, y a mí! Pero no puede ser.
    
    La conversación fue derivando hacia temas más ligeros y, finalmente, un par de horas después se retiraron a sus aposentos.
    
    El acuartelamiento principal en Ikoma Tome, como el resto, era un gran complejo prefabricado donde estaban las instalaciones comunales, entorno al que se distribuían, perfectamente alineadas, miles de tiendas de campaña donde se alojaban los soldados. Aunque la habían ofrecido prepararla un alojamiento en el complejo principal, Marisol reuso, no quería recibir un trato de favor. Anahis y ella, ocuparon una tienda junto a los baños comunitarios.
    
    —Hace mucho tiempo que no dormía en una tienda de campaña, —comento Marisol—. No sé, me siento rara.
    
    —Cuándo estabas en el Tercio de la milicia ...