Mi mujer, nuestro amigo y yo - Relatos Eróticos

Mi mujer, nuestro amigo y yo

Con mi mujer estamos viviendo y disfrutando de unas experiencias sexuales que ni nos podíamos imaginar que pudiese suceder. De mutuo acuerdo decidimos explicarnos cosas que pensamos cuando estamos entre amigos, por la calle, en la playa, etc y como es habitual salió el tema de probar intercambios y también tríos pero siempre con amigos nuestros nunca con desconocidos. Mi mujer Sandra me dijo que alguna vez mientras mantenemos relacione sexuales se imagina que lo está haciendo con Joseph y a veces piensa que estamos en una cama con Josep y Andrea, yo le comenté que me imaginaba haciendo el amor con Judith su gran amiga de siempre, así que un día estábamos en la playa nudista donde solemos ir y decidimos tontear o bien con Carlos ó bien con Judith ambos separados y si un día lo hacía uno otro día lo haría el otro. Esto nos calentó bastante, estuvimos unos días que follábamos a diario imaginando ese momento y al final llegó el día, fue un viernes por la noche, pero todo empezó esa misma tarde tal y como os voy a explicar.

Nos llamamos al trabajo y le dije si quería pasar por casa por la tarde y quedarse a dormir el fin de semana, la verdad es que después de la separación está un poco “tocado” y para esos estamos los amigos, me dijo que conforme que vendría, se lo dije a Sandra y le pareció fantástico, vino a tomar café y nos fuimos a la playa los tres, ya había hablado con Sandra y quedamos que adelante todo lo que habíamos hablado, en la playa Sandra como siempre en top ...

... lees y con una braguita tanga dejando sus nalgas al descubierto y sus tetas bien puestas a pesar de la edad que tenemos, en la playa Sandra se puso en medio de los dos y aproveché para ir a buscar bebidas y fué cuando Sandra le pidió que le pusiera crema, yo desde lejos le veía todo y cuando ví que le pasaba las manos por su culo me puso contento, dejaba pasar el tiempo y veia como Sandra le daba juego y el caliente que debería estar aprovechaba y tocaba, me acerque bebimos unos refrescos nos fuimos al agua y bueno lo pasamos bien, Sandra de vez en cuando me comía la boca pero también rozaba sus tetas con el cuerpo de Carlos.

Una vez en casa nos duchamos y en la habitación quedamos con mi mujer que se pondría ropa muy provocativa y así fue, una simple camiseta sin mangas donde se le apreciaban por los laterales las tetas y un tanga negro para que resaltara debajo de la blanca camiseta, salió primero ella, Carlos estaba allí y yo salí poco después, al principio todo iba bien, en la terraza nos tomamos un cubata, hablamos, reímos, etc y ella con sus posturas en la gandula, enseñaba más de la cuenta, eso nos puso cachondos a los tres, pero seguia todo su curso, preparamos la cena y después de una buena sobremesa, decidimos sentarnos en el sofá para ver una película , con la idea de que Sandra y el se empezaran a liar, me fui a limpiar los platos de la cena y cuando acabé fui al sofa y vi como se estaban morreando, al verme se separaron y cuando me senté le di un morreo a mi ...