Yerno abusador 1 - Relatos Eróticos

Yerno abusador 1

Siento escalofríos nomás de recordar esa escena, sus manos fuertes rodeando mí cuello y tapando mí boca...

Mí nombre es Elena. Tengo 53 años vivo sola con mí hijo ya que mí hija se marchó a vivir con mí yerno quien es el agresor en cuestión. Hace diez años me dejé con el papá de mis hijos y no he querido conocer a nadie más...

Eran las 3 de la mañana y me encuentro sola en la casa. Mí hijo trabaja de noche y no regresa hasta las 9 del día siguiente...
Me levanto al baño y siento unas manos fuertes y reconocí a mí yerno quien desde hace tiempo me hace miradas a mí trasero y pequeñas tetas, eso me excita por momentos pero sé que no debería... Se había metido a mí casa con las llaves de mí hija.. y me manda que me callase no pude reaccionar ante tal situación me lleva casi arrastrando a mi habitación y me susurra en el oído que voy a ser suya. Sentí escalofríos pasando mí cuerpo... Yo acostumbro a dormir con ropa ligera. Esa madrugada traía nomás mí blusa de tirantes y un cachetero que cubre nomás mis redondas nalgas y de un tirón el muy desgraciado me la arraca dejando mis pequeños melocotones al aire y se los lleva a su boca. Debo decir que no puse mayor resistencia ya que hace años un macho no me tomaba. Y pensé que el abusivo se calmarla pero no fue así. Después me arraca mí cachetero dejando mí vagina expuesta a su merced. El ...

... muy cabron ya estaba muy cachondo y me ensarta de un sólo su verga a lo que le dije que se calmara porque hace años que no tengo sexo con nadie y creo que eso le excitó mucho más y comenzó a embestirme con más fuerzas hasta el Punto que me hizo mojar. El maldito comenzó a decirme que era una puta vieja muy rica que hace ratos me llevaba hambre.. me cogía como un animal mis piernas me traicionaron y lo abracé para que me cogiera rápido y terminara pronto según mí pensamiento.. eres una puta suegra rica me decía en el oído y eso me excitaba mucho.  Pensé ya terminará cuando el muy cabron sacó su verga y me agarró del pelo para que de la chupara. El maldito restregaba sus huevos en mis labios. Yo de mala gana se los lamía cuando sentí que el maldito derramó toda su leche en mis pequeños pechos...
 Luego se fue al baño dejándome en mí cama tirada. Pensé que ya se iría al ratito regresa con su verga tiesa se veía excitado de nuevo a lo que ya no quise llevarle la contraria y me dejé llevar creo que ya lo estaba disfrutando. Me tiró a la orilla de la cama y abrió mis nalgas y empezó a lamer mí clítoris. Eran tan ricas esas lamidas que decidí relajarme hasta que el muy cabron me decía que le suplicara que me la metiera. Lo hice y me comenzó a cabalgar en esa posición el muy degenerado abrió mí culo y me llenó con su leche..

Continuará...