La profesora de ciencias naturales
Fecha: 14/08/2021,
Categorías:
Fetichismo
Tabú
Autor: zorro_en_celo, Fuente: xHamster
Mi profesora de Ciencias Naturales se prestó a darme clases de apoyo en su casa y lo que en un principio iba a ser una aburrida clase sobre las hojas de los árboles terminó siendo una auténtica y genuina clase de sexo por un probado profesor de sexualidad que iba finalmente a ser yo.Iba mal en la disciplina y materia de ciencias naturales y la Srta. Soraya que era mi profesora se decidió a darme clases de apoyo en su casa.Para los 50 años que tenía, la Srta. Soraya estaba muy bien y aunque había cogido algunos kilitos se la veía muy atractiva, pues veía como otros profesores y educadores la miraban con vicio y lubricidad.Una tarde, al finalizar las clases, se acercó a hablar conmigo del tema en cuestión.— mira Mateo, he visto que vas mal en mis clases y me gustaría que vinieras a mi casa y darte clases de apoyo, pues las necesitas para sacar adelante la materia que doy y vas retrasado — afirmó categórica la Srta. Soraya— bien, de acuerdo. Pero me gustaría que fuera más despacio, pues en clase casi no me entero y ahora Ud. va muy deprisa —— Vale, de acuerdo. Lo tendré en cuenta. Empezaremos más despacio y en cuanto tengas una mínima duda, levantas el brazo — apostilló Soraya. Salí del instituto y fui a casa, comí un sándwich de jamón y queso, una bebida con cafeína para no dormirme en casa de la Srta. Soraya y coger los libros de Ciencias Naturales y tomar el camino a casa de mi Srta.En el camino fui cavilando sobre cómo serían ahora las clases en casa de la Srta. y como ...
... sería su trato conmigo y si empeoraría o mejoraría.— Hola Mateo, ¿estás preparado para un par de horas conmigo? — inquirió la Srta. Soraya muy atenta— Hola, señorita, vengo preparado y atento para su clase aquí — testimonié todo correcto y amable.— ¡adelante, adelante!, he preparado esta habitación como un pequeño aula — manifestó la Srta.— Por mi perfecto, empecemos ya, que a eso he venido — descubrí yo.La señorita Soraya había estado adecuando esta pequeña habitación para darme clase como en el instituto y parecía vestir más sexy, pues se había vestido de negro, con la americana y la falda más ceñida y parecía que se le iban a saltar las tetas por arribaMientras me explicaba, yo disimuladamente me abrí de piernas, y abrí la cremallera del pantalón y comencé a pajearme para relajar, porque las clases de mi profesora me parecían realmente anodinas y apagadas.Durante la clase, ella se empezó a relajar y abrió más su americana y empecé a ponerme más cachondo y salido y ella comenzó a sonreír, porque se dio cuenta de que algo sucedía.Se acercó más a mí y me enseñó un poco sus pechazos y a pesar de que intentaba tapar mi erección, ella se puso nerviosa y yo empecé a tartamudear y ya no sabía que decir.Vio mi fantástica erección y pareció gustarle y empezó a ponerse cachondona y rijosa y se situó por detrás de mí y empezó a tirar de mi rabo y eso me excitó más si cabe y calentó.— ¿te he puesto cachondo, Mateo? — preguntó la Srta. toda sonriente—... la verdad es que si... — tartamudeé ...