1) Este relato sucedio hace unos meses por primera vez y luego se sucedieron varias, pero solo les contaré la primera. Solia ir a lo de mi amiga Emi, Ella era separada y con una hija de 11 años. Tenemos una gran amistad somos muy allegados, tan asi que solemos tener sexo entre amigos muy amenudo . Claro, Ella tiene su pareja con quien se ve, pero por alguna razón Ella la pasa mejor en la cama conmigo que con Él. Esto paso un día de tanto, de esos que solíamos hacer el amor en su casa, pero esta vez su hija, a quien llamaré barbi, se quedó, cosa que no era costumbre cuando estabamos con planes especiales. Ese día su abuela no pudo cuidarla y por lo tanto tuvo que quedarse. Al principio no hubo problemas y pensábamos suspender la cosa y dejarla para la próxima y ya que nos agradaba pasarla juntos los 3 no hubo problemas. La cosa cambio al entrar la noche que era particularmente fria y barbi decidio ir a su cama temprano, cosa que nos resulto óptima para algunos mimos al menos. Yo solia quedarme a dormir en su casa, cosa avitual y no extraña. Pero esa noche los mimos con Emi fueron demasiados y decidimos ser silenciosos e hacer lo de costumbre pero sin que barbi se enterase. Barbi ya sabía de sexo y la madre bien se lo habia explicado y bien lo entendía, ademas sabía lo que sucedia entre nosotros, pues Ella no era tonta y tampoco se lo ocultabamos. 2) Ahora las quiero describir para que sepan como son, Ella de piel cobriza, pelo negro y casi hasta la mitad de la espalda, ojos ...
... grandes y cafe de bueno cuerpo pero pechos pequeños. Apasionada en la cama como no conozco y por no conozco me refiero a mis experiencias. Barbi por su lado es igual a su madre pero de piel muy blanca y con pechos cada día mas grande. No era raro que yo y barbi jugaramos y no tuviera vergüenza Ella cuando estaba yo, tantas veces la vi cuando se bañaba, pues yo la saludaba, guauu que hermoso cuerpo en alguien de tan poca edad. Su piel brillaba con el agua. Tampoco era raro que se sentara en mi falda solo con la parte inferior de su ropa intima. Yo jamás la vi con ojos malos o en mala intencion, solo me parecia que en su inocencia Ella se divertia y se sentia segura en mi regazo. Su madre jamás se opuso o dijo algo pues nos conocemos bien, al menos Ella y yo, pues nos sorprendidos con barbi a quien creíamos conocer. 3) Esa noches, la noche que no olvidaré, nos fuimos a la cama como de costumbre, con charla amena, besos y caricias, las cuales fueron cada vez mas intensas al punto que ya no podíamos controlar el fuego interno que ya ardia. Emi dijo : no aguanto mas, las ganas me ganas, ¡quiero sexo ya!, pero seamos discreto que esta barbi y duerme ! O eso pensábamos. Como de costumbre ya comensamos. Las caricias se convirtieron en fricciones entre nosotros, el sexo oral era bueno y las penetraciones también, pero no gozabamos a pleno por ser silenciosos. Decir mas seria aburrirlos con cosas que ya se imagina y son de lo mas comunes, pero aca viene la gran sorpresa que todo lo ...