Lugar, luego, luego, me imaginé en donde estaba, sigilosamente me fui al cuarto de nuestro invitado y lo que vi, no me gusto, ella estaba ensartada arriba de ese cabron, lo estaba cabalgando a todo lo que daba, por un rato estuve observándoles, tome mi vieja cámara y les tome un video, que rico cogía con ese buey, de inmediato sentí un chingo de celos, porque lo hacía como si lo hubieran hecho desde hace mucho rato. Cuando cambio de posición, ella se sorprendió por unos instantes y siguió cabalgando a ese cabron con muchas ganas, estaba frente a mi ensartada, al verla así, me dije, total a lo hecho pecho, rápidamente le puse mi verga en su boca, ella solicita la agarro y me la empezó a mamar bien rico, me imagino buscando atenuar la pinche broncota que se le venía encima, casi me venía en su boca, así que hice que se bajara de ese buey y se pusiera en cuatro patas, cuando estaba en posición le di dos pinches nalgadas, nada más respingo al sentirlas, sin ninguna delicadeza se la deje ir toda, la trate como la vil puta que era, así que solo busque me satisfacción personal y después de unos cuantos empujones me vine dentro de ella. Con desprecio, le dije ahora si deslecha a ese hijo de ´puta, ella chorreando de semen, se volvió a sentar en esa vergota negra y lo siguió cabalgando, ella se me quedo viendo, a la vez que lanzaba sollozos de placer, después de unos sentones más tuvo un orgasmo, a la vez que ese cabron se venía a chorros, lo siguió cabalgando hasta que ella se ...
... tendió a su lado resoplado por la tremenda venida que tuvo, encabronado los dejes solos, tardaron un buen rato en salir, apenas lo justo, yo, ya no lo quería ver, así que ella lo fue a dejar al aeropuerto, después de un rato regreso y fue cuando le reclame, le dije, caray, güera, como eres cabrona, porque no me dijiste nada. Encabronado, yo le hice saber, que lo último que hizo no me había gustado, le reclame, que por lo menos me hubiera avisado, el que, ella se había ido por la libre, la verdad no me gusto nadita. Si bien es cierto, que siempre se había comportado con lealtad conmigo y que admiraba su buen hacer día con día, lo que sucedió al último, me dejo muy pensativo, sobre todo, por la forma en que cogió con ese tipo. Se preguntarán y dirán, que pinche delicado soy, pero una de las claves para que este tipo de encuentros se haga sin problemas, es que los dos estemos de acuerdo en hacerlo, cuando uno de los dos se va por la libre, empiezan los problemas. Problemas que empezaron tiempo después, cuando ella se escondía para verse con ese tipo. En el asunto de cuernos, el interesado siempre es el que se da cuenta al último y esta vez no fue la excepción, resulta, que después me entere de que este cabron era su amante, casi desde que nos casamos y ella invento, todo el cuento de su fantasía sexual, solo para poder coger con ese buey a gusto, ahora caigo, cuál era la razón de su ausencia por las tardes de la casa, pues iba a acoger con ese buey. También me entere que no vivía en ...