1. Asuntos de familia


    Fecha: 26/06/2017, Categorías: Infidelidad Autor: FMalvino, Fuente: CuentoRelatos

    ... seguían dando vuelta por la sala, mientras yo seguía sin entender nada.
    
    -“¡¡Nudistas, Amor, nudistas!!”- Apenas pudo aclararme mi esposa que tampoco paraba de reír.
    
    Y allí comprendí las actitudes de los presentes, como también recordé las conversaciones con Natalia sobre el tema en reiteradas ocasiones.
    
    La verdad, no me desagradaba que vieran desnuda a mi esposa y ni que tampoco me vieran a mí, es más, hasta incluso teníamos fantasías de meter terceros en nuestra cama. Todo era cuestión de encontrar a la pareja correcta y el momento preciso.
    
    A los dos nos gusta el sexo, es un ritual poner los viernes de noche el canal porno y terminar cogiendo en el sofá como bestias. Incluso nos filmábamos mientras lo hacíamos para luego subirlo a páginas de adultos y bromear con los comentarios que nos dejaban.
    
    Aquello era un juego que nunca imagine participar con tanta intensidad. Mi esposa había potenciado esa faceta que tenía dormida.
    
    No nos considerábamos enfermos, simplemente nos deleitaba disfrutar de nuestros cuerpos luego de duras jornadas de trabajo, como a otros les gusta ir al cine o salir a bailar.
    
    -”¡Bueno, es hora de sacarse estos trapos de una buena vez!”- propuso Carmen, la abuela, desprendiéndose la blusa.
    
    En un minuto estábamos todos desnudos, mis ojos recorrían cuerpos y formas que me sonrojaban por la clase de pensamientos que me despertaban.
    
    Ana Laura, mi suegra tenía una elegante figura, era como ver a Natalia dentro de unos 25 años y me ...
    ... gustó mucho ese futuro. Los kilos de más en María Luisa, mi cuñada, le sentaban muy bien realzando su grande trasero, daban ganas de poseerla salvajemente.
    
    -“¡Con razón mi nieta esta tan contenta!”- Exclamó Carmen mirándome las entrepiernas.
    
    -“Abuela siempre la misma”- replico Natalia conteniendo la risa.
    
    Mi suegro era un oso peludo, lo que le colgaba era de un tamaño respetable que daba miedo. Se acercó, me dio un fuerte abrazo como cuando me saludo en el altar, pero, esta vez fue un poco incómodo sentir nuestras intimidades tocándose.
    
    María Luisa, fue la segunda en saludarme apoyando sin pudor alguno sus pechos contra mí, luego mi suegra cuyo abrazo casi me provoca una erección cuando su pelvis apretó mi pedazo. Y por último Carmen que en un rápido movimiento me palpo el bulto con total impunidad.
    
    Pasamos al fondo, donde la piscina nos esperaba ansiosa de refrescar nuestros cuerpos. El chapuzón tuvo un gustito especial, sentir el agua tocando mis genitales me excitó. Espere un rato antes de salir. Más sosegado abandoné el agua con toda la intención de colaborar con mi suegro en la parrilla. Desde la cocina mi suegra pidió que alguien la ayudaran con la picada.
    
    -“Ve tú, por favor, me arreglo bien con esto”- Me dijo mi suegro con una guiñada.
    
    Mucho no entendí ese gesto y me encamine para la cocina, a mi paso Natalia y María Luisa estaban tomando sol totalmente desnudas… muy apetecibles las hermanas.
    
    Cada vez me era más difícil evitar una erección, pensaba ...
«1234...»