La fantasia de mi esposa hecha realidad
Fecha: 03/10/2017,
Categorías:
Primera Vez
Autor: lujuria69, Fuente: xHamster
... sabia que decir, pero como nos vió con tantaconfianza aceptó. Armando colocó la música apropiada y comenzó a mover sucuerpo, Ana trataba de disimular y desviaba su mirada, pero yo insistía en quelo mirara ya que se lo estaban dedicando a ella. Estaba muy tensa, no sabia quehacer, fue cuando a mi se me ocurrió decirle a Armando que yo iba imitarlo paraaprender y así hacerlo en mi casa con mi esposa. En ese momento Ana estuvo deacuerdo porque le pareció gracioso, al principio reía a carcajadas por mi show,pero ponía especial atención a los movimientos de Armando. Cuando estuvimos eninteriores Ana se sonrió pícaramente, me le acerqué y le pregunté que si legustaba, a lo que me respondió que le agradaba.Metí mi mano por debajo de su falda mientras Armando seguíamoviéndose. Al principio me rechazó porque le daba pena, pero yo insistídiciéndole que seguro estaba húmeda, ella lo negaba, pero al final aceptó.Mientras ella veía fijamente a Armando yo le metía mis dedos y le decía cosas aloído. Le dije a Armando que se acercara para que Ana le quitara el interior comosi fuera realmente un show, como ella estaba hirviendo dijo complacida que si.Ella bajó el interior y cuando vió aquella masa de carne que estaba frente a susojos, volteó a mirarme, yo cómplicemente acepté y ví como gustosamente se metíaese verga grande y negra en su boca. Se la sacó y comenzó a recorrer con sulengua de arriba abajo ese palo, sus ojos brillaban, sabía que su marido leestaba haciendo realidad su ...
... fantasía.Le quité la ropa y se acostó en el mueble, mientras se lamamaba a Armando yo bajé hasta su concha para chuparsela, estaba inundada defluidos, gemía de placer, se retorcia, mientras se tragaba esa pija negra. Mepedía que le dijera que era una puta y que yo era un cabrón que accedía a que sela mamara a otro hombre. Cuando le decía lo que me pedía lanzó un grito deplacer como nunca lo había hecho. Había alcanzado un orgasmo.Se sentó en el mueble y decidió llevar las riendas de lasituación, total era su fantasía. Me mandó a sentar en otra silla y levantó suspiernas bien abiertas y le ordenó a Armando que la penetrara, lentamente, parasentir su enorme pija, mientras ella me miraba, impotente, ante aquelespectáculo que yo había propiciado.Ella sudaba, le pedía al negro que la perforara, que le dieraplacer, que la tratara como una puta, se agarraba sus tetas y me daba lasgracias por ser tan comprensivo. Yo estaba a punto de estallar, le pedí que medejara cogerla y ella se negó, me dijo que quería verme masturbándome mientrasel negro se la cogía. Yo estaba alucinando y accedí a su petición, me masturbéhasta acabar viendo aquel grotesco, pero excitante escenario. Cuando Armando ibaa acabar le ordenó que la metiera en la boca y que se corriera en ella, lo hizo,no se cuanta cantidad de semen le vació pero fue mucho, se le salia por lacomisura de sus labios. Se tragó lo que pudo y me pidió que me acercara a ellapara darme un beso, un beso lleno de leche de un desconocido.Luego se levantó ...