Mis alumnas preferidas
Fecha: 26/06/2017,
Categorías:
Jóvenes
Autor: Anónimo, Fuente: RelatosEróticos
... a cubrirse
sus pechos con una camiseta. Yo le guiñe un ojo y ella respondío más serena. Se
había sobresaltado de manera, pero yo con mi rostro quería transmitirle que no
pasaba abosluntamente nada.
NAtalia recuperó el gesto de su cara, se bajó la camiseta y
mientras el chico se vestía ella se acarició los pechos, mirándome a los
ojos.... y por último me tiró un besito de sus labios.... Esa imagen fue
superior a mí, le pegué tal embestida a Aurora que casi abro la puerta del coche
del impulso, me había corrido con la imagen de mi Natalia y sus pechitos...
mmmmmmm Aurora se desplomó y yo con mi mano le decía adios a mi alumna que se
iba en el coche con ese desgraciado.
Al día siguiente en los pasillos del instituto Aurora se
mostraba muy contenta de nuestro encuentro, pero yo quise hacerle muchas
ilusiones. Mis pensamientos estaban en Natalia, en esos pechos que había en
aquel descampado, en esa manera de moverse, quería que fuera mía, sólo mía,
daría lo que fuera.
En clases todo seguía como siempre, los 2 hicimos como si no
nos hubieramos visto. Pasó el tiempo y mi calentura por Natalia no descendía,
todas las noches me acostaba con esa estampa en mi mente. Llegaron los exámenes
y Natalia, como era de esperar obtuvo un notable, mientras que su amiga Dolores
no corrió la misma suerte, obtuvo un 4, casi un aprobado.
Dolores al final de clase se dirigió a mi mientras le
esperaba Natalia, "D. Manuel, me gustaría ...
... comentar el examen con Vd, y que me
acompañe Natalia, aunque ella ha aprobado.". No era lo más normal, la nota
estaba puesta y era justa, pero tal y como estaban esos 2 bombones, cualquiera
les decía que no, era la oportunidad perfecta para coger a Natalia por banda, y
de paso a su amiga, que estaba también de toma pan y moja, no tan guapa, pero
con un culo que me volvía loco y unos pechos que tampoco se podían despreciar.
"De acuerdo, os espero esta tarde en mi despacho", dije yo
intentando disimular la felicidad en mi rostro. "Esta tarde, creía que sólo
podía ser por la mañana?", me replicó Dolores. "Tienes razón, pero es que estoy
muy mal de tiempo, y además así estaremos más tranquilos", Dolores se encogió de
hombros y me dijo que sí, quedamos para mañana por la tarde en mi despacho.
Esa noche no pegué ojo. Me imaginaba a las 2 sobre mí
"profesor, le gusta esto..., que quiere que le hagamos...."....me masturbé un
par de veces antes de conciliar el sueño.
Al día siguiente por la mañana como siempre, un día igual que
otros tantos, ninguno comentamos nuestra reunión para esa tarde. Me quedé a
almorzar cerca del instituto y una hora antes ya estaba en mi despacho. Lo
ordené, me cambié de ropa y me dispuse a esperar lo que fuera a ocurrir.
Habíamos quedado a las 7 y eran las 7:45 y no apareció nadie.
No me lo podía creer, que habría pasado?. Cerca de las 8 llamaron al teléfono
"D. Manuel preguntan por Vd. 2 alumnas, las ...