Luis, Jacobo y un verano 17 A falta de pan…
Fecha: 25/06/2017,
Categorías:
Gays
Autor: Alvaro-L-de-H, Fuente: SexoSinTabues
... derecha de Felipe que emitió un ligero quejido con parte de mi polla dentro de su boca. -Ahora es tu turno. –y sacó su verga del culo de Felipe que sonó con un plopppp pegajoso. Parecía mandar en él chico, me pareció muy fuerte y retiré la verga de su boca mirándole a los ojos, entendió que le pedía permiso y reprodujo una sonrisa mientras movía su cabeza asintiendo. -Haz lo que te dice Jacobo, pero hazlo durar un poco. –sabía que el muchacho se había quedado a la puerta de tener un orgasmo, y mi primo no le había dejado llegar sacando de golpe su verga. -¿Cómo quieres que te lo haga? -quise ser amable aunque lo que deseaba era meterla de una vez y follarle para correrme. Acerté al preguntarle, se tendió sin más y abrió las piernas sujetándolas con sus brazos sobre sus hombros. Dos minutos más tarde estaba enterrado en él entrando y saliendo, sentía que me llegaba la leche por la verga y entonces Felipe abrazó mi cuello obligándome a pegar mi pecho al suyo. -Córrete mientras me besas. –no tuve otra opción y apretó para que uniéramos nuestras bocas. Me ahogaba queriendo sentir mi polla moviéndose y con su lengua dentro de mí, acariciando sin parar el interior de mi boca. Sentí un espasmo al dejar mi primer chorro de semen en su culo y como resbalaba de mi boca la saliva que él atrapaba y ...
... succionaba de mi boca, comenzó a temblar y morder mi labio, nos estábamos corriendo a la vez, yo en lo más profundo de su ser y él entre la piel de nuestros abdómenes. Temblábamos los dos como flanes sacados del molde, elevaba su cadera para rozar su pene con mi vientre a la vez que sacaba y metía un trozo de mi polla en su ano. Mientras le miraba, asombrado de la potencia de mi eyaculación, pensaba en que hacía pocos minutos no me gustaba este chico y resultaba ser genial, su cuerpo, todo él y la forma de mamar y dejarse follar por nuestras vergas. Nos habíamos limpiado y cuando volvimos a la habitación proyectaban en la pantalla una peli de tíos, mejor que la visionada antes, pero estábamos cansados, satisfechos y Felipe apagó la tele. La oscuridad nos envolvía, decidieron dormir conmigo en el suelo y tendimos una sábana y un edredón cruzado para taparnos. -¿Qué te ha parecido mi primo? -Felipe no contestaba y Jacobo repitió la pregunta con alguna pequeña variación. -Me gusta, si, Luis me gusta. -mi primo reía, imaginé su sonrisa sardónica y ácida. -Lo vamos a pasar bien los tres, seguro que será así. –tenía razón, así resultó durante años y compartimos muchas cosas de nuestra vida juvenil, momentos de intimidad, fiestas donde él y mi primo me llevaron, algunas que me gustaron y otras no. Continuará?