1. Mi Tio El Ranchero (CUARTA PARTE )


    Fecha: 24/06/2017, Categorías: Masturbación Primera Vez Tabú Autor: Juan_Ivan, Fuente: xHamster

    ... vuelta y lo seguí hasta el fondo, pasando por un lado de la montaña. Él iba adelante de mí, callado. Y sí, efectivamente apestaba, así que no me le acerqué mucho. En el trayecto, se quitó la camisa y la dejó colgada en algún palo. WOW... ¡qué espalda!... total contraste con su pecho pues no tenía un solo vello. Siguió caminando y llegamos. El pesebre de La Canela estaba en esquina y él se acercó por un lado y yo rodeé la esquina para pararme del otro lado, por dos razones: Una, no quería volverlo a oler, y Dos, quería verlo de frente.Estuvimos un rato contemplando el potrillo, estaba hermoso. Le hice varias preguntas pertinentes y él me contestaba lacónico, pero con esa mirada torva que no dejaba de inquietarme. Se hizo un rato de silencio y como a propósito, el potrillo comenzó a orinar. Yo lo vi con ternura, pero la ternura se disipó rapidísimo porque el tal Jacinto dice, al mismo tiempo que empieza a bajarse el cierre: "Pos es que de ver dan ganas Patroncito" y se sacó la verga y se dispuso a orinar. "¿A poco a usted no le dan ganas de orinar cuando alguien más orina por ahí?". Levanté los hombros y algo le contesté. Mis ojos me habían vuelto a traicionar porque estaban adheridos a una manguera oscura y flácida de fácil 20 centímetros. Lo curioso es que no estaba orinando, por el contrario, se dio cuenta de que no podía quitarle los ojos, y se acomodó, es decir, se hizo un poco para atrás para que pudiera verlo bien de cerca a cerca y le dio unas sacudidas. Mi boca habló ...
    ... por voluntad propia:- ¡Pero si ni estás orinando!- Ahí va... ahí va... ¿usted no tiene ganas?- No... Horita no...- Sáquesela patroncito, y va a ver que en cuanto empiece a mear yo, se le va a antojar a usted.Por alguna razón que pueda explicar, hice lo recomendado, pero yo saqué una rígida regla apuntando hacia arriba. Se hizo el silencio. Yo viendo la suya y él viendo la mía, en completo silencio. Al verme, comenzó a sacudirla con cadencia y rápido se le empezó a parar. Siguió y siguió hasta que se vio armado con un instrumento de entre 25 y 30 Cms. Avanzó un poco hasta que pudo recargarla sobre uno de los palos y comenzó a mover la cadera como cogiéndose la cerca. No me quitaba los ojos de encima, ni yo a él. Y como ya estábamos en el entendido de la excitación exhibida, se metió la mano a la boca y la sacó repleta de saliva, la embarró en su verga y se empezó a masturbar lentamente.Mi excitación era demasiada, pero la imagen de mi padre de pronto vino a mi mente y decidí dar por terminado aquello, además, ya se la había visto, que era mi objetivo. Le dije:- No. Nada salió. Como tú no orinaste a mí no me dieron ganas. Ya con eso (y me la metí al pantalón)- No patroncito... espérese. Dicen por ahí que chupándole se pueden sacar los orines (me reí)- Eso no es cierto.- A ver... vamos probando... déjeme que se los saque patroncito... (Sin dejar de masturbarse despacio).Me quedé inmóvil, tentado diabólicamente por ese tipo que estaba hecho un adonis, pero lo pensé dos veces y le ...
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