Hola. Espero que se acuerdan de mí. Soy la misma persona que recibió un año nuevo muy inolvidable, y esta historia es mi segunda experiencia con Rosita, que no concluyó con la llegada del año nuevo.Pasarían unos seis meses desde el 1 de Enero, cuando Rosita me llamó a la video tienda para invitarme a una gira familiar que ellos siempre están haciendo todos los años. Primero me mandó la invitación con Clara, y después de llamó su esposo para confirmar mi asistencia. Me daba mucha pena rechazar la invitación de tan buena persona (si supiera lo que hice con su esposa), así que se la acepté. Rosita me llamó un miércoles, me mandó a avisar en la mañana del jueves, y por la tarde su esposo confirmaba la invitación.La gira familiar consiste en recorrer varios lugares, tascas y restaurantes donde se toma de todo; y cuando uno está bien entonado, se va a una buena tasca donde haya música y así echar una buena bailada hasta más no poder. Con razón se rasca tan rápido; me explicó el procedimiento para ver si me animaba, y yo le dije que sí que le iba a echar pierna al asunto. Hasta me retó para ver quien aguantaba más tomando de todo. Le acepté el reto; aunque ya sabia lo que eso iba a implicar; estar cerca de Rosita.Aunque me emocionaba la idea de asistir a la gira familiar, no iba a ser fácil estar un rato a solas con ella, pero eso no sería un impedimento por lo menos para intentarlo.Llegado el día sábado, antes de concluir mi jornada laboral Clara me llamó y me preguntó:- ¿Por fin ...
... vas a ir a la invitación de mi papá?Yo le dije.- Claro que sí.Clara me remató:- Ok. Recuerda que mi papá te está esperando con aquello que más te gusta...Yo sabía lo que significaba aquello. Se trata de una botella de whisky White Label y ya el hombre sabía cuál es mi punto débil para aceptar una negociación. A Clara la respondí:- Muy bien, dile a tu papá que me dé por lo menos una hora para ir a mi casa y bañarme.Clara me sorprendió con una solicitud de su padre:- No te preocupes, mi papá me dijo que si quieres pasa por tu casa nada más con la ropa que te vas a poner, y que aquí te bañabas. Te pone todo lo que necesites. Aquí ya todos estamos listos y vestidos, solo esperamos por ti.Me dejó sin palabras, y le dije que sí.- Ok, paso por mi casa y busco mi ropa.Cerré la tienda de video, pues era el encargado en ese entonces, agarré un taxi y me fui a mi casa, tomé la ropa, un bolso donde iba a meter mi ropa y me fui a la casa de Rosita a pasar la noche familiar con Clara, Rosita y compañía.Cuando llegué a la casa de Rosita, ya su esposo me estaba esperando con una botella de White Label lista para que yo la destapara, y ya estaban listos para salir; llegando a la casa, el marido me presentó a Carlos, un sobrino que tiene una camioneta de pasajeros quien era además el que nos iba a llevar.Rosita se veía espectacular; con un vestido que llegaba hasta una mano por encima de la rodilla color oscuro y unos tacones negros bien altos, lo que hacía una hermosa y misteriosa combinación ...