1. Que rico es tirar y cobrar


    Fecha: 10/09/2017, Categorías: Intercambios Autor: Anónimo, Fuente: RelatosEróticos

    Entre las mujeres hay un dicho que se repite siempre desde tiempo de las abuelas, para satisfacer a tu marido en la cama se tiene que ser una puta, pero en mi se materializo en todo el sentido de la palabra, les voy a comentar junto con David (mi marido) esta historia que nos sucedió en una noche desenfrenada.
    
    David; Una de nuestras fantasías como pareja es que mi mujer se ponga a putear en la calle y yo la “levante” con el auto e irnos a tirar a un hotel, ya lo habíamos hecho una vez y salió de maravillas, a eso de la una de la madrugada la dejo en una esquina con un vestido súper ajustado y súper chico, me doy la vuelta a la manzana detengo el carro converso con ella y la subo, en el hotel le doy dinero y nos ponemos a tirar muy rico, esta noche prometía el mismo placer, fuimos a la habitación del hotel, se cambió se puso un vestido muy corto y ceñido sus sandalias de taco 9, sin medias (era verano e inclusive en las noches hace calor), salimos en mi auto y fuimos a una disco-bar a tomar y calentarnos, a eso de la 1:30 de la mañana salimos, ella había tomado y estaba alegrona y bien excitada, estábamos llegando al lugar que es una avenida poco concurrida, marque su número telefónico para estar comunicados todo el tiempo mientras me doy al vuelta a la manzana, me puse el auricular del teléfono para poder manejar tranquilo, le deje en la esquina ya convenida, y empiezo a dar la vuelta por la manzana, para “levantarla”
    
    Kiara; Me baje del carro como a mitad de cuadra y me ...
    ... puse a caminar hacia la esquina, estaba con tragos y media cachonda y no me importaba estar parada en la calle, me gusta sentir la sensación de una puta, que me miren, que toquen el claxon, que disminuyan la velocidad, todo eso, ni bien baje se sobreparo un auto con un viejo feo, me dijo sube, no le dije, estoy esperando a un cliente, y me moví en dirección opuesta, arranco y se fue, vino otro auto, en él había un tipo bien plantado, muy elegante, guapo, me dijo:
    
    Hola; hola respondí
    
    Te llevo a un sitio me dijo; depende de cuánto tengas le dije
    
    Cuanto necesito tener me pregunto; yo obvio estaba haciendo tiempo y le solté una cifra como para que se fuera, son 300 le dije, 300 dólares, por una hora, y lo que paso después me dejo pasmada, ya me dijo sube, pero que sea hora y media y cuando me dijo eso, la verdad sentí una comezón en la concha, y sentí que me mojaba, no sé por qué , pero lo sentí, haber muéstrame la plata, le dije y me saco los billetes, para esto vi que el carro de mi marido daba la vuelta por la esquina, sube me dijo, yo pensé es ahora o nunca, y me subí, creo que fue una reacción instantánea, o no sé qué, pero subí, me empezó a hablar educadamente, me dijo quieres un hotel o mi Dpto. Hotel le dije, es más por acá hay uno cerca (era el hotel donde tenía la habitación con mi marido), mientras me sobaba las piernas con sus manos calientes y suaves, fuimos al hotel, entramos por el estacionamiento, el bajo pido una habitación, regreso se sentó en el auto, ...
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