-
Abusando de mamá al regresar de su trabajo
Fecha: 23/08/2019, Categorías: Fantasías Eróticas Autor: Fernán, Fuente: CuentoRelatos
... detrás del cuerpo delicioso de mi madre y saco un par de toallitas húmedas, me dispongo a limpiarla cuando escucho que alguien está abriendo la puerta de la entrada. Enseguida recojo las toallitas, apago la luz de la habitación de mi madre y recojo mi ropa. Me apresuro a llegar a mi habitación pues escucho los tacones de mi hermana subiendo las escaleras. Ya encerrado en mi habitación escucho como mi hermana se encierra en su cuarto por algunos minutos y luego sale hacia el baño, hace sus necesidades y luego se ducha. Mas tarde regresa a su habitación y se duerme. Yo quiero limpiar el cuerpo de mi madre pues si despierta con mi semen se va a dar cuenta de que algo sucedió. Son ya las dos de la mañana cuando quiero entrar en su habitación y de pronto veo por debajo de la puerta que se enciende la luz, corro de regreso a mi habitación y escucho a mi madre volviendo el estómago en el baño. En definitiva no pude limpiarla. Es sábado por la mañana y me encuentro desayunando junto con mi hermana, mi preocupación aun no termina, escucho en la parte de arriba que mi madre ya se ha despertado y que se ha metido en la ducha. Mi hermana me platica de su fiesta pero yo estoy muy preocupado por lo que piense mamá y no la escucho. Después de un buen rato baja mi madre con un talante pésimo, la noto distante y molesta. No menciona nada durante el día pero sé que ha descubierto lo sucedido por su actitud. Conversa con mi hermana pero a mí ni siquiera me toma en cuenta. El ...
... domingo mi hermana se va a pasear con sus amigas y yo me quedo solo con mi madre, no me atrevo a mirarla a la cara mientras miramos la televisión en la sala. De pronto ella estira la mano con el control remoto en ella y apaga la televisión. – ¡Lo que hiciste no tiene nombre! – suelta finalmente. Yo no sé que contestar, se nota en su voz un odio que nunca le había conocido. – A partir de este día no quiero que me vuelvas a dirigir la palabra… entiendes? Solamente quiero que lo hagas para lo necesario. – dijo mirándome con ojos que soltaban fuego. – Entiendo, y perdón – dije finalmente apenas con un hilo de voz. Me levanté y me dirigí a mi cuarto. Efectivamente desde ese día mi madre no se digno dirigirme la palabra ni por error y así pasó toda una semana. Mi padre regresó el lunes y afortunadamente mi madre no le comentó nada de lo sucedido, las cosas continuaron en la casa su curso normal frente a mi hermana y mi papá, pero cuando me encontraba a solas con mi madre ella me aplicaba la ley del hielo, yo sabía que no era para menos y me sentía mal por eso aunque en verdad no me arrepentía de haber cogido con ella, lo único malo es que nunca más iba a volver a repetirlo. Así pasó casi un mes y mi padre nuevamente tuvo que salir de viaje, era nuevamente un viernes por la noche y mi hermana me avisó que llegaría tarde. Estaba de nuevo solo en casa estudiando y eran las diez de la noche nuevamente cuando se escuchó el auto de mi madre llegando. Me asomé ...