Amalia y el Director - Relatos Eróticos

Amalia y el Director

... tangas recién lavado que estaba colgando en la ducha, acabé corriéndome en el. encima de cabrón apaleado.

El sábado por la mañana al despertar, mi mujer estaba maquillándose en nuestro cuarto de baño, el pelo mojado de haberse duchado. Lucía un picardias blanco de encaje transparente, medias haciendo juego y zapato de tacón alto de igual color. Y en la cama, a mi lado tenia el vestido de novia que usó en nuestra boda.

¿Y yo le dije Amalia qué significa esto? , y sin dejar de maquillarse me dijo:Es que hoy cuando se corra dentro de mi oficialmente voy a ser su mujer, desde que nos casamos tú leche fue la única que me ha entrado en mis entrañas, ya sabes que he follado con otros pero nunca he dejado que se corran dentro y por eso hemos ido a que me revisen el DIU,porque quiero que me llene el coño de leche como tú y ese vestido simboliza la unión de una mujer, a su macho que quiere que le llene de leche el coño y eso mismo va a pasar dentro de algunas horas.

Yo no dejaba de asombrarme día a día. Reconozco que desde que el Director abrió la puerta a mis cuernos, descubrí un , morbo y sensaciones nunca vividas, pero la respuesta de mi mujer o de la que fue mi mujer, me causó un profundo pesar y miedo a perderla, a que se enamore de él, cada palabra me hacia pensar en el futuro de mi familia.

Aguantándome mi aparente valentía, le dije mis miedos y sentimientos, me dijo:¡Tonto!, ¿Creo que ya lo hablamos esto, o no? A ti, te amo, a él lo deseo, nunca te voy a dejar, ...

... esta relación no resta, suma. Piensa que veces se necesitan tres en una relación para sentirse satisfechos uno u otro, y ese es precisamente nuestro caso. Vamos, no pierdas tiempo y vístete que tienes que prepararle el desayuno a Fabio y llevarlo a Fútbol.

Cogi a mi hijo y nos fuimos. No bajó a despedirnos para que nuestro hijo no la viera vestida de novia, tan solo escuchamos un “ hasta luego que lo paséis bien”.

Conduje rápido para llegar con tiempo al campo de fútbol del colegio, con la ilusión de encontrar al Director sentado en una de las gradas como siempre, pero no fue el asi.

Antes de que empezara uno de los partidos Amalia me mando un whatsapp a mi teléfono diciéndome que él ya estaba en casa. Mis nervios me obligaron a que me fuera ha andar por los alrededores para tranquilizarme. El tiempo no corría, los segundos parecían minutos, los minutos horas y las horas días, fue un martirio. Me consumía la angustia de saber que mientras nosotros estábamos allí ,ella estaría siendo follada por una polla que no era la mía. Al tiempo que mis ojos veían a lo lejos a Fabio, meter un gol mi mente imaginaba al Director acostado en mi cama de matrimonio metiendole otro gol a mi mujer en el mismo chocho, en la misma cama que concebimos a nuestro hijo, con su polla bien tiesa y mi esposa cabalgándolo con el vestido de novia puesto y las tetas al aire.

Volvía a tener conciencia del final del partido cuando mi hijo, tomándome de la mano dijo:¿Nos vamos a casa, papa?,Miré el ...