MI MUJER ES LA "PERRA" DE NUESTRO PERRO - Relatos Eróticos

MI MUJER ES LA "PERRA" DE NUESTRO PERRO

... cola moviendose siempre, nervioso, pero a la vez mirando y apenas se movia, cuando estaba mi esposa ya sobre el colchon a 4 patas, recien azotada, le dije - Ahora ya puedes chuparle la polla, perra si lo estas deseando. si mi mujer, no se hubiera movido no hubiera yo dicho nada ni protestado pues, simplemente lo dije din pensar, pensando que mi mujer llegaba a eso con el perro cuando ya estaba en un estado de frenesí, me equivoqué, como en muchas cosas, mi esposa fue a 4 patas en busca del perro, comenzo acariciando su polla con la mano, yo no me moví estaba en una posición privilegiada para verlo todo, la mejor, la punta apenas asomó y mi esposa hudio su cabeza bajo el cuerpo del perro, empezó a comerle el pollón a la vez que se iba poco a poco acomodando tirandose su mano acariciaba los huevos del perro finalmente y ella tirada bajo el perro como si quisiera hacer un 69 con él solo que ella sola se comia el pollón y el perro sin moverse se corria una y otra vez, iba soltando su "leche" transparente en la boca de mi esposa despues la vi salpicarle la cara volver a metersela en la boca mi esposa hasta que el perro se retiró, nuncalo hemos obligado ni en esos momento ni ahora, una vez intenta irse lo dejamos, eso hizo alejandose con su vergón ya recogiendose pero casi todo fuera en un color rojo amoratado ahora y con finisimas lineas rojas y cortas capilares, mi esposa se volvio a colocar a 4 patas andando hacia mi, me abrí las piernas y ella atrpó mi polla ahora, pensé ahí ...

... tendria para entretenerse un buen rato, a la vez que pensaba en como iba a follarla, mientras ella me la chupaba y yo todo abierto de piernas relajado en el sofa sentado la dejaba trabajar a ella, estuvó unos pocos minutos, chupando, yo pensando en que pronto tendria que follarla o comerle el coño,pues debia estar ya mas que encendida, el perro se habia tumbado en una esquina lamiendose su verga, cada vez mas recogida. El perro se levantó primero comenzó como la noche anterior a olisquear a mi esposa a chupar su coño esta a su vez se abria mas las piernas sin dejar de chuparmela, las dos veces anteriores con el calentón no habiamos puesto nada en las pezuñas del perro, hice que parara mi esposa, esta vez, si en el mueble teniamos los calcetines de invierno gordos, cogí un par enrollado, volví a sentarme mi esposa volvio a su postura y yo a coger el perro le coloqué en las patas los calcetines gordos al principio intento quitarselos hasta que obedeció y yo aguantandolo del collar sentado el perro quedó de lado a mi mujer, su cabeza a la altura de su espalda y a la vez yo que me iba de nuevo a levantar para como las otras dos veces subir al perro, esta vez fue él quien se subio al tener la cabeza así lo hizo en un instante mi esposa dio un gritito al sentir la pezuña primero en su espalda aunque recubierta, esta vez, vi como la pezuña la pasó al otro costado y no fue como las dos veces anteriores, el perro apretaba con las pezuñas a mi esposa haciendo que esta quedara retenida ...